¿COMO ESTA CONSTITUIDO EL SER HUMANO?

POR
El Doctor PAPUS
DIRECTOR DE LA ESCUELA SUPERIOR LIBRE CIENCIASHERMÉTICAS OFICIAL DE LA INSTRUCCIÓN PÚBLICA

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CÓMO ESTÁ CONSTITUIDO ¿EL SER HUMANO?
Cuestión: primordial
¿Cómo está constituido el ser humano? ¿Tiene solamente un cuerpo que produce todas sus facultades?
¿Tiene un alma inmortal o un Espíritu unido con este cuerpo? ¿Si el cuerpo y el Espíritu existen en el hombre él está solos presencia o son unidos por otro elemento?
Tales son los problemas que agitan a los filósofos desde siglos largos y es a esos problemas que venimos para dar una solución exponiendo las enseñanzas de la tradición oculta y cristiana de Occidente. En esta pequeña exposición, destinada a todos, hablaremos lo menos posible de filosofía, y no estableceremos ninguna discusión Los que querrán controlar nuestras afirmaciones son rogados que se trasladado a las gruesas obras de los Maestros y a los estudios completos sobre el ocultismo. Veamos primero las tres cuestiones fundamentales. 1 ° ¿El Ser humano tiene solamente un cuerpo que produce todas sus facultades?
Responderemos no a esta cuestión basándonos sobre todo en algunos hechos siguientes:
A - De 0 mes a cinco años todas las células del cuerpo desaparecieron íntegramente y han sido reemplazadas sin qué el cuerpo hubiera cambiado de forma y que el aspecto de la persona se haya enturbiado. Las células materiales son sólo el instrumento modelado por una fuerza otra que la materia.
B - Claude Bernard demostró que cada una de nuestras ideas necesitaba a la muerte de la célula nerviosa que sirvió para él de soporte. Cuando nos acordamos de un hecho que llegó diez años antes, más de un millón de células nerviosas y diferentes llevaron el cliché de la idea que como consecuencia es independiente de estas células y de su transformación.
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C - Los fenómenos del hipnotismo que trascienden, la comunicación de cerebro a cerebro sin intermediario material, la aparición de la imagen de una viviente en peligro de muerte a sus parientes situados en distancias muy grandes, la acción a distancia y sin intermediario material de la fuerza nerviosa y del Pensamiento del ser humano y la muchedumbre de hechos del mismo género, prueban aparte de todo sistema filosófico que el cuerpo no es el solo elemento que nos constituye.
2 ° ¿El Ser humano está constituido por un cuerpo mortal y un Espíritu inmortal, sin otro Principio? A esta afirmación dogmática de ciertos teólogos y de muchos filósofos todavía responderemos NO. Invocando las principales razones siguientes:
A - La Anatomía nos muestra en el hombre dos sistemas nerviosos distintos servidos cada uno por un género de músculos. Primero el sistema nervioso conciente servido por los músculos estriados; luego el sistema nervioso inconsciente o la vida orgánica servido por los músculos para cintas libres. B - La fisiología nos muestra que, durante el sueño ordinario, el sistema conciente acaba todas sus funciones, mientras que el sistema nervioso ganglionar persigue y acelera todas las venas. La dualidad de los sistemas, debe implicar la dualidad de los principios constituyentes.
C - Toda la tradición egipcia, cabalística, gnóstica, hermética, corroborada
por San Pablo, afirma la existencia de un Principio INTERMEDIARIO entre el cuerpo
mortal y el Espíritu inmortal, Principio llamado por San Pablo anima, en su
distinción corpus, anima et spiritus. (recopilación ,anima el espíritu)
Una muchedumbre de experiencias de ocultismo prueba la posibilidad de proyectar este principio intermediario fuera del cuerpo, durante la vida.
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Esquema de los tres
centros del cuerpo físico
(Vientre, Pecho, Cabeza),
levantados sobre la
columna vertebral, el
hombre es constituido
por TRES PRINCIPIOS:
1 ° El cuerpo físico y
material.
2 ° Un Principio
Intermediario.
3 º El Espíritu inmortal.
Tal es la cuestión a la cual respondemos sí así como lo hicieron los egipcios desde el siglo XV antes de nuestra era, lo mismo que todas escuelas de iniciación y de profecía que transmitieron la Cábala, la gnosis, la Alquimia y la Ciencia Oculta bajo todas sus formas, como lo afirmaron Sócrates, Platón y todos los neoplatónicos, y como lo afirma San Pablo. En la demostración rápida de esta que consagramos en este pequeño trabajo.
Los Tres Principios
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El primer escollo que hay que evitar es el sistema a priori que son para él la
afirmación de un autor. Si el hombre está realmente constituido por tres
grandes Principios y no por cinco, por seis, ni por siete, ni por nueve, ni por
veintidós, ni por alguna, no tiene importancia otras divisiones múltiples
establecidas por análisis subsidiarias, toda la constitución física del ser
humano debe mostrarnos, gritarnos, esta ley de la Trinidad porque la
naturaleza, no cambia sus, leyes que siguen los planos y cada pedazo del Ser
humano debe repetir la gran ley general.
¿Cuántas partes, tiene el dedo de una mano? TRES (falanges, falangina, falangeta)
¿Cuántas partes tiene mi miembro superior? TRES MANO, antebrazo, brazo.), ¿Cuántas partes tiene mi miembro abdominal? TRES pie, pierna, muslo.) ¿Cuántas partes por fin tiene como mi cuerpo considera aparte de los miembros? TRES (el vientre, el pecho, la cabeza).
Y no son allí dividamos facticios porque huesos especiales o órganos muy
particulares, existen para cada de estos tres grandes segmentos,
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LA TRINIDAD EN EL SER FÍSICO.
Las tres secciones (Vientre, Pecho, Cabeza), Del ser físico de los correspondientes miembros a
cada sección. Relaciones orgánicas de las secciones entre ellas y con la cara.
Pero si el NÚMERO TRES es repetido el infinito en el cuerpo físico, otros números aparecen. Así tenemos dos veces cinco dedos, y tenemos siete aberturas a la cabeza. (Dos ojos, dos orejas, dos ventanas nasal, una boca).
Esto nos señala que no debemos ser dogmáticos o sectarios y que tendremos
que buscar la razón de ser para tener por objeto todos estos números accesorios, desarrollarnos ciertos aspectos y algunos bajo divisiones de la Trinidad de ahí grande y constituyente.
Para evitar toda oscuridad, pidamos al cuerpo físico la llave de todas nuestras deducciones. Es la analogía, El método característico del ocultismo que ayudará poderosamente a la deducción y la inducción. Centros del cuerpo físico pares de miembros (abdominal, torácico y cefálico triple mente dividido.
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EL CUERPO FÍSICO - EL CUERPO ASTRAL
El Hombre Animal y el Hombre Espíritu
El cuerpo humano nos presenta tres grandes centros, el vientre, el pecho, la cabeza, a cada uno de los cuales son vinculados un par de miembros.
Los tres grandes plexos del gran simpático.
Plexo cervical, Plexo cardíaco, Plexo solar.
Centros orgánicos de acción del Cuerpo astral.
En el vientre son vinculados los miembros abdominales
(Muslo, pierna, pie); al pecho, los miembros torácicos (brazo. Antebrazo, mano); a la cabeza " los miembros cefálicos (maxilar inferior). Cada uno de estos centros tiene una función fisiológica bien caracterizada, por ejemplo, el vientre transforma el alimento en una sustancia humana o quilo, (Líquido blanquecino absorbido por la mucosa intestinal durante la digestión de los alimentos) el pecho transforma el quilo en sangre y la cabeza extrae de la sangre la fuerza nerviosa que mueve toda la máquina humana. Además, cada uno de estos tres grandes centros es representado en los otros dos. Así el vientre, tiene sus cavidades y vasos linfáticos en todo el ser 10 humano; el pecho envía la sangre, dinamizada por la respiración, a otros centros y finalmente la cabeza maneja, a través de sus dependencias nerviosas, todos los órganos sin excepción.
Lo que él allí de haber sido curioso y de interesado para nosotros, es que todo este trabajo orgánico de las fábricas abdominales, torácicas o cefálicas absolutamente se hace aparte de la intervención de la conciencia y de la voluntad del Ser humano. Es pues el Hombre Animal quien trabaja sólo, y El Hombre Espíritu tiene funciones y órganos a él y muy distintos los precedentes.
El Hombre Animal es accionado por un sistema nervioso especial, el
sistema nervioso de la vida vegetativa u orgánica, constituido casi
exclusivamente habla nervio grande simpático, sus plexos y sus
dependencias. Es él quien hace latir nuestro corazón, que contrae y dilata
todas nuestras arterias y todas nuestras venas, que hace obedecer el hígado,
el estómago, los intestinos, los pulmones hasta sin inquietarse de saber si el
Hombre Espíritu es despertado o adormecido, porque todos los órganos
marchan tanto durante nuestro sueño como cuando somos despertados
reemplaza, que come, no el medio de las células embrionarias y de Glóbulos
blancos, los microbios venidos del exterior, que cura las heridas superficiales
de la piel y que hinchó, se ocupa de toda la cocina orgánica. El Hombre
espíritu
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LOS ÓRGANOS FÍSICOS DEL HOMBRE ASTRAL
Los principales plexos del Gran Simpático y su radio de acción (Medio esquema).
No tiene que ver nada en todo esto. ¿Quién dirige pues todo este sistema nervioso especial?
Porque, lo dijimos, un sistema de órganos es sólo un soporte de algo: los órganos sufren la función pero no lo crean ya que sus células mueren ha medida que la función es cumplida.
Este principio que dirige todo, el trabajo del cuerpo físico recibió muchos nombres diferentes a través de los tiempos, porque ha sido conocido desde la antigüedad más alta. Los egipcios lo llamaban el Cuerpo Luminoso (Khd) los Pitagóricos el Carro del Alma, los latinos el Principio animador (Anima) como San Pablo, los Filósofos hermetistas le 12 designaban bajo el nombre de Mediador Plástico y bajo el nombre de Mercurio universal; Paracelso y su escuela, así como los discípulos de Claudio de San-Martín, el Filósofo Desconocido, lo llamaron Cuerpo astral porque saca su Principio de la sustancia interplanetaria o Astral. Cualquiera que sea el nombre que lo recibe, debe comprender que este principio se encuentra en el ser de nuestros órganos, tal como el sistema nervioso, su función y existencia que es tan cierta para el ocultista como para el fisiólogo, a esto los llamaremos CUERPO ASTRAL.. Es el obrero ocultado por el ser humano, es el caballo del organismo cuyo cuerpo físico es el coche y que el ser conciente es el cochero. El caballo es más fuerte que el cochero, es él quien tira el coche, y sin embargo es el cochero, mucho menos pero es más inteligente, que dirige el caballo y, por ahí, el coche también, en el Ser humano, el Hombre Animal es más fuerte que el Espíritu, es él quien mueve la máquina humana y sin embargo es el Hombre Espíritu, mucho menos , pero más inteligente, que dirige, en la vida exterior El Hombre Animal, y, por ahí, la máquina humana muy completa. Para comprender bien esto, repitamos el estudio del cuerpo.
El cuerpo tiene tres centros; el vientre, el pecho, la cabeza, pero, por esta
palabra cabeza, entendemos el cráneo y su contenido es decir toda la parte
horizontal de los centros superiores. Delante del cráneo y verticalmente está
colocado
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LA CARA
Síntesis de los tres Centros humanos:
La Boca puerta de entrada del vientre, la Nariz puerta de entrada
Del pecho, las Orejas puerta de entrada del cerebro.
¿Una serie de órganos que constituye la cara y estos órganos tienen esto de individuo que funcionan, para la inmensa mayoría, sólo mientras que nosotros somos Despertados?, es al decir mientras que el Hombre Espíritu está en acción sobre el exterior (lo que los filósofos llaman yo.) Tan pronto como nos dormimos ya los ojos se cierran, las orejas acaban su función, la boca se cierra, el olfato se para y única, la respiración viene para agitar las ventanas nasal. Los órganos de la cara pertenecen pues al Hombre Espíritu y no al Hombre Animal y cada uno de ellos tiene por objeto establecer un control sobre cada uno de los centros de este Hombre Animal.
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Así la boca (que presenta una abertura única porque el estómago es simple y no doble), es la puerta de entrada del vientre con un portero fiel que es el gusto que tiene el cargo de dejar entrar sólo las cosas que le gustan al Hombre espíritu. También todo lo que pasará en el vientre vendría para pintarse sobre la boca y sus anexos (lengua llena confusiones gástricas, lengua seca y tostada inflamaciones intestinales, labios descoloridos y secos de las peritonitis, etc., etc.) Las ventanas nasales tienen dos aberturas porque los órganos pulmonares son dobles; son la puerta de entrada del pecho con un portero fiel que es el olfato encargado de prevenir al Hombre Espíritu de los lugares donde la respiración es peligrosa para el organismo. Todo lo que pasa en el pecho viene para pintarse sobre las ventanas nasal o sus anexos (partes sacada del cardiaco, los pómulos rojos de la neumonía, etc., etc.) Las orejas son la puerta de entrada del sistema nervioso Cefálico, y los ojos; dan beneficio sobre todo al Hombre Espíritu. También la congestión y la anemia del cerebro Pintarán sobre las orejas, mientras que la locura y los disturbios psíquicos se pintarán sobre la pupila y en La mirada, El Hombre Espíritu es bien pues el cochero del Organismo: ahondado el gusto y la boca dirige la elección de alimentos que van a ser transformado por el vientre y van a venir para reparar la materia de todo el ser humano.
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EL HOMBRE-ANIMAL Y EL HOMBRE - ESPÍRITU
Todas las partes de la figura teñidas en negro indican el dominio el cual puede actuar la Voluntad: las partes blanco indican al contrario el dominio de la Vida orgánica sobre el cual la Voluntad no tiene fuerza directa, es el dominio del hombre animal, del Ser astral inferior.
Por el olfato, dirige la elección del medio respirable y por el nervio neumogástrico al ritmo respiratorio, y como consecuencia a la distribución de la vida, del calor y de la fuerza en todo el organismo. Por fin por la vista y el oído dirige la entrada de las sensaciones ya filtradas por el tacto y, por ahí, al alimento de sus facultades más altas. Acabemos este estudio del cuerpo diciendo que el vientre es el cuartel general del cuerpo físico; el pecho el cuartel general del Cuerpo Astral; por fin la cabeza sirve de centro de una parte para la parte intelectual del cuerpo astral, que llamaremos a ser psíquicos, y por otra parte para el Hombre Espíritu mismo.
Ocupémonos ahora de relaciones de estas misceláneas principios (cuerpo físico, cuerpo astral y Espíritu) entra en ellos.
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LOS TRES CENTROS PSÍQUICOS
Platón hizo reír a muchos filósofos diciendo que el hombre tenía tres almas - Ahora, cada uno de los Principios que era representado en todos los demás (Coche la Naturaleza no separa sus creaciones por segmentos aislados) resulta que no tiene razón allí para que cada centro del hombre no tuviera su manifestación intelectual, su sección agudo más o menos oscurecido, como tiene del kilo, de la sangre y de la fuerza nerviosa.
La anatomía ya nos señala este hecho mostrándonos que la médula espinal
se hincha al nivel de los tres grandes centros, con una hinchazón
suplementaria para la reproducción - Pero donde este hecho se hace todavía
más notable para el centro cefálico
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Las tres hinchazones medulares y la triple acción Sobre la Laringe, el Brazo y la Pierna. medio esquema extraído de La Fisiología sintética.
Claro, es cuando vemos que el nervio gran simpático, que es el soporte verdadero y físico del
cuerpo astral, presenta también tres grandes plexos uno cervical
. El otro cardiaco para ella. Pecho, el otro por fin abdominal (o solar) para el vientre con uno adjunta para la reproducción.
Si dejamos el dominio físico para dirigirnos a las observaciones, no filósofos
"Señor de todo el mundo" comprobamos que cuando una gruesa pena, una
gran alegría o una noticia inesperada nos llegan esto no está en la cabeza,
sino bien
Adaptación psicológica de los tres Principios del Hombre
En el pecho y al nivel del corazón que recibimos un golpe, para hablar como el pueblo. He aquí la reacción vulgar de la inteligencia de este centro. Cuando, a pesar del coraje mandado por el espíritu una reacción física se produce o en el momento de uno. Examinen esté sobre el campo de batalla, esto no es en la cabeza sino en el centro abdominal que la sensación se 18 produce, con consecuencias, bien conocidas de los pobres soldados. Hay que, una vez más, dar culpa a las argucias de los filósofos. Somos hechos así ver que Platón tenía razón, en su recordatorio de la enseñanza secreta de los Templos egipcios y que, lo mismo que el cuerpo presenta tres centros, lo mismo que tres Principios habitan estos tres centros, de hasta tres géneros de manifestaciones intelectuales manifiestan estos tres Principios.
Así el centro físico manifestará el instinto con la sensación como el medio de reacción, y el placer el dolor como los resultados del movimiento producido. El centro astral manifestará la intuición con sentimiento como el medio de reacción y el amor o el odio como los resultados de la emoción producida. El centro psíquico manifestará la idea con sentimiento como el medio de reacción y la verdad o el error como, los resultados del entrenamiento producido.
Así el mundo de los instintos; el desde pasiones, el de los entrenamientos intelectuales caracterizados el primero por el vino, el segundo por las mujeres, el amplio tercero por el juego, van a venir para entregar asalto al Espíritu que los domina y los gobierna (o puede gobernar a ellos todos), como la Boca gobierna el vientre y las Ventanas nasal el pulmón, en el cuerpo físico.
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El Espíritu, gracias a la voluntad servida por la fuerza nerviosa, puede oponerse a los entrenamientos de la inteligencia del cuerpo, que quiere dormirse por el alcohol, el astral que quiere aniquilarse por la pasión, por fin del ser psíquico o astral superior que quiere perderse en las emociones del juego.
Los tres círculos impulsivos y el círculo equilibrante de la Voluntad
Pero para esto hay que acostumbrar los órganos que sirven el Espíritu para
sus funciones de reguladoras y de jefes y no dejarlos dormirse y enmohecerse
en la inacción.
Es porque las escuelas militares que procuran espiritualizar los centros
pasionales, las escuelas eclesiásticas que procuran espiritualizar al ser físico,
y las escuelas mágicas que tienden a desarrollar la voluntad tienen, cada uno,
ejercicios y entrenamientos apropiados, que todos ellos, tienen un fin común el aplastamiento de las reacciones de abajo por la puesta en funcionamiento de las fuerzas de arriba.
Este entrenamiento es necesario, pero esconde una trampa: el de hacer
olvidarle al hombre que es sólo un ser débil y de hacerle creer que es algo por
él hasta y casi un Dios, cuando su Voluntad totalmente poderosa saliente de 20 su dominio manda no sólo a sus órganos personales, sino que todavía a las fuerzas visibles e invisibles de la Naturaleza.
Lo mismo que el fuego que sale del leño que arde en la chimenea no es creado habló de materia del árbol, pero está sólo del sol fijado por esta materia y que regresa en su centro, y que el árbol que diría que era él quien hizo el sol se haría burlarse de él, también las fuerzas generadas por el hombre son sólo productos de refracción venidos del plano divino después de todo.
También los antiguos alquimistas ellos había colocado un oratorio al lado de cada laboratorio para mostrar que la Oración es siempre, el corolario de la magia y que la humildad es el correctivo necesario de toda evolución espiritual.
Las consideraciones precedentes hicieron presentir la razón para el estar de
nuestra estancia sobre tierra. Vamos a tratar de alumbrar un poco este
problema importante, viendo algunos puntos de la parte invisible del hombre o
lo habrá producido por sus acciones físicas y morales e intelectuales.
EL PRINCIPIO FÍSICO
Centro; el Vientre. - emanación en el Pecho y la Cabeza (esquema).
Las Auras del Ser Humano. - el Registro de las ideas en el Invisible. Una serie de experiencias muy curiosas perseguidas al principio por un americano sabio del nombre de Buchanan vinieron para mostrar que cada 21 objeto puede contar una parte de los hechos a los cuales asistió. La Ciencia que deriva de esta práctica se llamó Psicometría o Medida o Descripción por medio del Alma, porque consiste en colocar el objeto que hay que estudiar sobre la frente de un ser humano llevado con este fin. El alma directamente ve entonces una serie de imágenes que se remiten a los hechos más importantes a los cuales ha sido mezclado el objeto.
Tomemos un ejemplo para ser mejor comprendido. Un día en una reunión
a la cual asistían varios
EL PRINCIPIO ASTRAL EN EL SER HUMANO
Centro; el Pecho. - encarnación en el Vientre y la cabeza (Representación esquemática).
sabios y literatos, habían traído a uno de nuestros amigos que desarrolló en él
esta facultad de Psicometría. Un asistente le da a estudiar un viejo reloj que se apoyaba en él. Mi amigo vive: 1 ° Primero un patio (género Luís XIV), personas nobles y duelos. 2 ° Una escena de la Revolución francesa en la cual una vieja dama montaba al cadalso y fue guillotinada. 3 ª Una escena de operación quirúrgica en un hospital moderno. La persona que había dado el reloj fue dejada estupefacto, este reloj había pertenecido a uno de sus antepasados muerto en duelo bajo Louis XV; 2º A una abuela guillotinada bajo la Revolución; 3 ° Puesto en reserva, había retirada y llevada el día de una operación hecha a la mujer del asistente.
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Cito un hecho personal de Psicometría; pero los encontraremos centenas en los libros especiales.
Lo que resulta de todos estos fenómenos es que
EL PRINCIPIO ESPIRITUAL
Localización de los tres centros del Hombre (Representación esquemática). - centro: Cabeza. -
encarnación en el Pecho y el Vientre.
cada objeto puede llevar su historia escrita invisiblemente alrededor de él. Le es de allí también para el ser humano. Cada uno de nosotros lleva alrededor de él un brillo invisible al ojo de carne pero perceptible para el alma elevada.
En este brillo son inscritos en forma de imágenes los resultados más
importantes de nuestros pensamientos y de nuestras acciones. Este brillo se
llama, según la tradición, Aura y hay un aura para cada Principio. Hay pues un
brillo o un aura del cuerpo físico muy poco extendido, un brillo o un aura del cuerpo astral, por fin un brillo o un aura del Espíritu. Es el último quien ha sido conocido en las tradiciones religiosas que tienen rodeado de aureolas las cabezas de los santos y de las divinidades para simbolizarlo. Es gracias al brillo de los Principios del Ser humano que se explican muchos fenómenos en apariencias extrañas, como las simpatías o las antipatías súbitas en el momento del primer encuentro de un ser, como las intuiciones y las previsiones dichas inconscientes etc., etc.
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Ocultista llevado, c.-a.-d. Que desarrolló sus facultades de percepción del invisible, se da cuenta a primera vista del valor efectivo de un ser humano, no según sus vestidos, no según su aspecto exterior, pero según su brillo invisible.
EL AURA ASTRAL Poblada por los sentimientos (esquema).
El hombre que se considera bueno, o poderoso, o superior a otros hombres, el que juzga y el que critica sin cesar a otros, el que cree que él evita los sufrimientos por el aislamiento, en lugar de compartir las de sus semejantes, Ellos todos ésos pueblan su atmósfera invisible de feas imágenes que el vidente y la misma sonámbula de la esquina perfectamente verán.
En cambio las buenas acciones, la certeza que no se es mejor que otros y
que las circunstancias solas, permitieron no hacer daño que se acusa otros de
haber hecho, las humillaciones libremente consentidas y sostenidas sin debilidad, el ejercicio de la verdadera caridad no sólo físico, sino que sobre todo moral; todo esto puebla la atmósfera invisible de bellas representaciones simpáticas, de imágenes luminosas que se llama en los círculos de iniciados:
clichés.
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Esquema del Aura Espiritual Las imágenes de las buenas acciones están en la parte blanca, las representaciones de las malas acciones en la parte negra, - A la izquierda de la parte blanca, la Humildad, en medio la Caridad, a la derecha la Oración.
" a la derecha de la parte negra la Calumnia, en medio el Orgullo (en la serpiente), a la izquierda la Pereza.
Los objetos, los individuos, las naciones, y los astros tienen cada uno sus clichés buenos o malos y es a los estudios que fueron consagrados los antiguos colegios de profetas.
Vemos por ahí que la constitución humana es la llave dado muchos misterios.
El estudio particular del cuerpo astral nos mostrará cómo este Principio puede
salir del ser humano, actuar y aparecer en la distancia, influir bien o mal en los
seres, explicando a la inmensa mayoría de los fenómenos del Magnetismo, del espiritismo y de la Magia. Este estudio cuestiona un trabajo especial quién completará éste.
Retengamos que el ser humano no esta constituido solamente por un cuerpo y por un Espíritu inmortal sino que a la imagen de la Trinidad creadora, consta de un cuerpo, de un cuerpo astral y de un Espíritu inmortal o, para decir como San Pablo, de un cuerpo, de una alma y de un Espíritu.
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Es allí la clasificación efectiva y natural correspondiente a la división del cuerpo, a la de los miembros, a la de toda la Naturaleza, y a la llave de la constitución serle dado por las tres hojas del Embrión.
CLASIFICACIÓN DIVERSOS PRINCIPIOS
Clasificación a 9, 7, y 5 elementos.
Lo podemos por lo tanto de esta clasificación natural analizar al hombre de manera más profunda todavía observando que cada Principio mismo tiene, tres adaptaciones. Así el cuerpo físico se adapta en tres secciones para sostener otros Principios (vientre soporte del físico, el tórax o el soporte del astral y la cabeza o el soporte del Espíritu). El cuerpo astral se manifiesta también bajo tres modalidades según que es en relación con Cuerpo físico, con su centro puro o con Espíritu. Por fin el Espíritu se polariza bajo tres aspectos según que espiritualiza el cuerpo físico, el astral o que actúa su propio centro.
Cabeza Nervios ESPÍRITU Ser Psíquico Vida intelectual
Pecho Sangre SENTIMIENTO Vida orgánica
Vientre Linfa INSTINTO Vida celular
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Endodermo
Mesodermo Huevo fecundado
Ectodermo
CABEZA ectodermo
Cerebro
Nervios Fluido nervioso
PECHO mesodermo
Venas y
Arterias Corazón Sangre
VIENTRE
Endodermo Intestinos Estómago Linfa
Aparatos de
generación
Dios
Principio
creativo
Cabeza ESPÍRITU Ser psíquico
Pecho SENTIMIENTO Vida orgánica
Vientre INSTINTO Vida celular
GENERACIÓN
Reflejo de
Principio
creativo
De
La Materia
Para ser claro vamos a emplear términos generales y a evitar todas las palabras técnicas. Reventaremos tanto muchas vejigas como se presenta como faros a los principiantes en estos estudios.
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Los tres Principios que constituyen el hombre son: el Principio físico, el Principio Astral y el Principio Espiritual, Los llamaremos: FÍSICO, ASTRAL, ESPIRITUAL. Estos Principios se unen unos a otros. Una sola palabra es necesaria para nosotros es la palabra UNIÓN.
Obtenemos así aplicando sobre nuestro estudio la disposición del Tarot y de los Séphiroth que da sólo la tradición occidental:
Centro del Físico.
Unión del Físico y del Astral.
Unión del Físico y del Espiritual
Para el Astral: unión del Astral y del Físico. Centro Astral.
Unión del Astral y del Espiritual.
Para el espiritual: unión del Espiritual y del Físico. Unión del Espiritual y del Astral. Centro Espiritual.
Lo que nos da nueve divisiones o nueve Elementos entre los que están tres Principios primordiales y seis elementos derivados. ¿Por favor, déles nombres? Quedemos occidentales, es decir claros y metódicos.
Pidamos a la Cábala y al Tarot su rigorismo y todos estos elementos van a nombrarse en ellos así mismos con sencillez.
Para esto echemos un vistazo sobre el cuadro según el que resume lo que acabamos de decir. Las columnas horizontales indican las modalidades del mismo Principio y el colones vertical las representaciones de un Principio en otras.
Unión del
Espiritual y
del Físico
Unión del Espiritual y del
Astral Centro Espiritual
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Unión del
Astral y del
Físico Centro Astral
Unión del Astral y del
Espiritual
Centro Físico
Unión del Físico y del
Astral
Unión del Físico y del
Espiritual
La primera columna Vertical será la de los CUERPOS.
La segunda columna vertical será la de las ALMAS:
EL tercero el de los ESPÍRITUS,
Tendremos así:
El centro físico o EL CUERPO FÍSICO. La unión del Astral y del físico o el cuerpo
astral (la parte corporal del astral), la unión del espiritual y del Físico o el
cuerpo espiritual.
He aquí el cuerpo espiritual de San Pablo, este carro del Alma de Pitágoras, este elemento, tan difícil de comprender cuando no se estudia el origen. Veamos las almas.
La unión del físico y del Astral será el alma física (o la parte física del alma).
El centro Astral constituirá el alma astral o centro real del principio anímico.
La Unión del espiritual y del Astral constituirá el alma espiritual. También se definiría el Espíritu físico, (Unión del Físico y del espiritual), el Espíritu anímico (centro de Espiritualización del alma) y el Espíritu espiritual (centro Personal del Espíritu.)
Si consideramos al ser humano constituido, vemos que cada uno de los Grandes Principios actúa como una corriente eléctrica de la que están el encuentro con otra corriente producida una chispa. Estas chispas han sido confundidas sin razón con principio, porque generalmente debieron sólo un tiempo además de la vida terrestre.
Más los elementos de Unión a menudo se confunden de modo que la Unión del Físico y del Astral y la del Astral y del Físico por ejemplo constituyan un solo elemento en lugar de dos. Así es como el Ser humano 29 aparece bajo el aspecto de siete elementos, como informan ciertas sectas Budistas, de cinco elementos como lo dicen varias escuelas Brahmánicas.
El pequeño cuadro siguiente permitirá reconstituir estas divisiones:
Unión Espiritual Tiene como S.-A.
A.-S. Unión Astral Unión A.-P.
Tiene p.. Unión Física
Pero lo que ninguno ocultista perteneciendo a una iniciación seria dejará pasar sin protestar, es la afirmación sin pruebas que el sistema septenario es la llave única de la constitución del hombre, mientras que esto está en contradicción total con la anatomía, la fisiología y la observación más elemental.
Un septenario es, en general, el punto de abertura de un sistema cuyo ternario es la base; y todo se vuelve oscuro, difuso e incomprensible, si no se procede por el estudio primordial de ternario creativo.
Es allí la vía seguida por Jacob Boehme, el Maestro de teósofos cristianos,
todos es allí la vía los quienes prefieren la orden y la lógica a las enseñanzas
sin método e imposibles exponer claramente,
Y caemos a nuestra vuelta en la oscuridad. Porque muchos lectores
encontrarán muy árida esta última parte de nuestro estudio. Es sólo más tarde
que tomara toda la importancia.
Para tratar de explicárseles cómo todos estos términos pasan del tres al nueve, luego del nueve en septenario, vamos a tomar un ejemplo muy vulgar, el transporte en coche, del caballo y del cochero, y siguiendo esta imagen se 30 le tendrá cuenta de la manera en la que se puede estudiar los elementos que constituyen el hombre que pende vida. En otro trabajo aprenderemos de todo eso que se hace después de la muerte.
EL TIRO
Imagen analógica de la Constitución humana
Grandes cifras: 1. El cochero (director), la imagen del Espíritu,
2. El caballo (motor), la imagen del Astral.
3. El Coche (muda), la imagen del Cuerpo.
(Las pequeñas cifras indican sus divisiones)
Una tripulación consta de tres principios constitutivos: un coche, un caballo, un cochero. El coche pasivo y mudo es la imagen del cuerpo físico, el caballo, el pasivo y el motor es la imagen del cuerpo astral, y el cochero activo y directivo es la imagen del espíritu.
Consta a su vez de tres partes: la cabeza, los brazos, el cuerpo.
El caballo de tres partes también: la cabeza, el cuerpo, las patas.
El coche de tres partes: asiento, el cuerpo, el coche, las ruedas.
He aquí nuestros nueve principios que existen cuando el coche está en la cubierta, el caballo en la cuadra y el cochero en ella. Habitación.
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Pero reunamos estos tres elementos y veamos lo que esto se hace: los brazos del cochero van a confundirse con la cabeza del caballo para constituir, por las riendas, el sistema directivo de la tripulación. Por otra parte, de cuerpo del caballo vaya a unirse con el del coche por medio de las parihuelas para constituir el sistema motor de la tripulación.
He aquí nueve elementos reducidos al septenario así como sigue:
Tripulación no
constituida
Tripulación
constituida
Cabeza
del cochero 9
Cab
eza del cochero 7
Cochero
;
brazo del
cochero 8
Cuerpo del
cochero 7 Cuerpo del cochero
Riendas. - sistema de dirección.
Unión de
brazo del cochero 6
la cabeza del
caballo 6 Cabeza del caballo 5
Caballo;
Cuerpo del caballo
5
Patas del caballo
4 Patas del caballo 4
PARIHUELAS. - sistema
Motor 3
Asiento
del
coche;
Azadas del
coche 3 Azadas del coche 2
Cuerpo del
coche 2
Ruedas
del coche 1 Ruedas del coche 1
32
Ocupa un asiento del coche tiene
Transporta en coche
Extracto del Tratado elemental de Ciencia oculta (5* edición), p. 389.
Ya dijimos que la inmensa mayoría de las discusiones provenían de nombres diferentes consagrados al mismo principio por filósofos diversos o por escuelas diversas.
Este pequeño resumen de la constitución humana que es destinado sobre todo a los principiantes en estos estudios de lo oculto, creemos que nosotros les prestamos servicio resumiendo en un cuadro los diferentes nombres consagrados a cada principio por autores diversos y en épocas diversas así como en Tradiciones diferentes.
Este cuadro es muy incompleto. Tiene por objeto sólo mostrar al estudiante como hay que buscar ante todo donde se coloca el principio del que habla un autor. Por fin hace falta también que el estudiante se acostumbre a devolver el ternario es decir a tres términos las enumeraciones en 5, 7 o 9 principios que podrá encontrar. Por fin jamás hay que olvidar que el principio intermediario, siendo doble en su acción, tiene menudo dos nombres.
Ocultismo
contemporáneo
Id.
Principio
Material E
Inferior
Principio
Intermediario
Principio
Superior
Filósofos
Hermetistas Cuerpo Alma Espíritu
Algunos Rosa
Cruz y
Ciertos ocultistas. Cuerpo
Mediador
plástico Espíritu
Cuerpo
Vida o
Espíritu
Alma
inmortal
Escuelas
espiritistas (Allan
Kardec) Cuerpo Peri espirito Espíritu
Antiguos Khat Ka y Khon Bai
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egipcios
Cábala
Nephescb (o
Gaph)
Rouach (e
Imago)
Neschama
h
Pitagorismo
La Carne
Sombra y
Manes
Hombre
Astral
Paracelso
Cuerpo
elemental
Archée
Evestrum
Alma
Inmortal
Hindúes Rupa
Kama Rupa (o
Linga sharira) Atma
Chino Xuong Khi Wun
San Pablo Cuerpo Alma espirito
LOS TRES PRINCIPIOS DEL HOMBRE
Tabla de correspondencia de los nombres en escuelas diversas y tradiciones
Para facilitar la reducción al Ternario de los siete Términos
Vamos a tomarle a BARLET una llave de la Clasificación en siete Principios
que será muy útil para los que querrán volver a la División natural sintetizando
Los detalles de análisis. (Encontraremos los detalles de análisis. En el Tratado
elemental de Ciencia oculta), 5 ° edición.)
El Espíritu
Espíritu puro y
Voluntad celeste Wun Atma
El Alma
propiamente
Dicha
( Asociación de
ideas) 3 Tinh Buddhi
El Alma ancestral
( Luz, y calor) Thàn
Manas
Superior
Inferior
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Fluido
Electromagnético El
Astral El Soplo de
Vida 2 Khi Kama Rupa
La Fuerza sensitiva
(Movimiento) Than Linga Sharira
La Fuerza vital
(Sangre) Mau Prana o Jivatma
Tejidos, cadáveres
inertes o Sustancias
orgánicas
1
xoung
Rupa Stula
Sharira
Correspondencias de la Reducción a Nombres indios
Siete elementos Principio original chino
CONCLUSIÓN
La inmensa mayoría de las discusiones que se elevan entre los hombres que piensan en los grandes problemas que agitan la humanidad provienen de una confusión de términos o de un defecto de observación. En esta exposición rápida de la constitución del ser humano, nosotros evitamos tanto el extremo detalle como las afirmaciones dogmáticas. Es en la anatomía más elemental, es en los primeros rudimentos de la fisiología, es por fin a la observación corriente que nos dirigimos para pedir la solución de nuestro problema.
Y todas las ciencias interrogadas nos responden que el Hombre es una
Trinidad sintetizada en admirable Unidad.
El hombre, como lo afirmaron los viejos sabios del antiguo Egipto, como le sostuvieron sobre todo los cabalistas y los filósofos Hermetistas, como lo declara San Pablo, es donde es triple y uno, hecho a la imagen del verbo creativo, del Cristo divino del que la forma humana proclama la ley.
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Dejemos pues a los filósofos clásicos y los teólogos preguntarse si un
término intermediario entra el principio de materia que es el cuerpo y el
principio divino que es el espíritu inmortal es necesario para la belleza o para
el equilibrio del raciocinio. La naturaleza responde brutalmente a esta cuestión
por el la tuviera, estableciendo órganos especiales para la acción de este principio intermediario que llamamos: cuerpo astral, pero que recibió a una muchedumbre de otros nombres.
Cuerpo física, Alma, Espíritu, tal es la trinidad de constitución del ser humano que nos esforzamos por alumbrar de nuestra mejor. Encontraremos detalles más grandes en las obras especiales sobre la cuestión citados al fin de esta exposición. También nos reservamos de publicar pronto otros estudios sobre el mundo invisible y sobre las facultades todavía poco estudiados aquí por el cuerpo astral. En esperar nosotros seremos felices de recibir las observaciones que podría suscitar la imperfección de nuestro modesto ensayo.
PAPUS

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