ARCANO 0 (EL LOCO)
EL LOCO
Comienzo del Arcano Mayor
El Loco yace al comienzo de la arcana mayor, pero también de alguna
manera aparte de otras cartas. En las cortes medievales, el bufón era
aquel que no se esperaba siguiera las mismas reglas que los demás.
Él podía observar y luego introducir diversión. Esto
hace al Loco impredecible y lleno de sorpresas. El nos recuerda el potencial
ilimitado y la espontaneidad inherente a cada momento. Hay un sentido con
esta carta de que todo va - nada es seguro o verdadero. El Loco agrega lo
nuevo y poco familiar a una situación.
El Loco también representa la fe completa en que la vida es buena y
que vale la pena confiar. Alguien podría decir que el Tonto es demasiado
inocente, pero su inocencia lo sostiene y le da alegría.
En las lecturas El Loco puede señalar un nuevo comienzo o un cambio
de dirección - el que lo guiará a un camino de aventura, maravilla
y crecimiento personal. El también le recuerda que debe mantener su
fe y confiar en sus respuestas naturales. Si Ud. está enfrentando un
momento de decisión o de duda, El Loco le dice que crea en Ud. mismo
y siga a su corazón, no importa cuán loco o tontos parezcan
sus impulsos.
Este Arcano Mayor, El Loco, es el Cero o el 22, según sea necesario,
sobre todo en las prácticas adivinatorias. También para indicar
que hay un eterno recomenzar después de haber superado un estadio espiritual,
es decir, El Loco es el Comienzo y/o el Final. Recordemos los mitos de la
Circularidad del Tiempo, el Eterno Retorno, etc.
En general en el Tarot, la parte superior de la carta es el Oriente, la inferior
es Occidente, el lado derecho el Sur y el izquierdo el Norte.
Con el Sol en el Oriente, el Loco marcha de Norte a Sur, recorriendo el Templo
Universal.
El Loco es la Conciencia Cósmica, la Causa sin Causa de todo lo que
es. Su número, 0, nos recuerda el Huevo Cósmico del Dador Universal.
Como Arcano inicial, el Loco nos contagia la alegría del Viaje que
vamos a emprender. En su mano izquierda lleva la Rosa Blanca del Amor Puro
y en su derecha el hatillo del Viajero en que lleva el Oro, las Copas, las
Espadas y los Bastos, las herramientas que utilizaremos en el Viaje. Este
Viaje lo hacemos pues llenos de Amor y preparados iniciáticamente.
El Loco sugiere un estado alterado de conciencia, que los esoteristas llaman
"superconciencia" la que nos acerca al verdadero conocimiento del
Ser Humano. Es la superconciencia el estado al que llegan los Iniciados.
El Sol, única fuente de energía de que dispone la Tierra, es
el padre de todo lo existente aquí: el cabello rubio de El Loco es
la Energía Solar que llevamos dentro. El reino vegetal está
representado por la corona de hojas y el Animal por la pluma del sombrero.
Su ropa interior es blanca, la Sabiduría, oculta en el exterior por
el ropaje negro de la Ignorancia. El bordado de la capa tiene tréboles
y discos de 8 radios, significando la órbita solar. Su cinturón
es el Zodíaco. El cinturón es artificial, pues también
lo es el Tiempo, invención humana. Dios no tiene Tiempo, es la Atemporalidad.
Al Loco lo acompaña un Perro, símbolo de la Inteligencia Personal,
que junto con la superconsciencia, nos guiarán en el viaje. Los picos
lejanos nevados representan el pensamiento Abstracto. La vara es negra, significando
varias cosas: la Voluntad; se convertirá en la Vara del Mago; nos recuerda
la necesidad de medir, sólo tenemos un día para cambiar, y ese
día es hoy. Y es negra porque todos tenemos poderes ocultos...el Loco
los despertará. En la bolsa se alcanza a apreciar un águila
con su ojo abierto, el Ojo que todo lo ve. Nos indica la necesidad de callar
sobre los secretos que se nos revelarán en el Viaje.
El Loco está caminando sobre un elevado risco, y ante él se
abre un abismo. Así ven desde abajo los racionalistas a quienes inician
el Viaje Espiritual: como locos. Pero el Loco, desde esa altura, avanza confiado,
pues su visión alcanza más lejos que la de los que están
abajo...
El Loco, en resumen, nos indica el largo Viaje de la Iniciación...
ARCANO I (EL MAGO)
EL MAGO
Carta I del Arcano Mayor
El Mago es el arquetipo del principio masculino activo - el último
realizador. Él simboliza el poder para explotar las fuerzas universales
y usarlas con propósitos creativos. Note su postura en el dibujo. Él
actúa como una vara que ilumina - un brazo extendido hacia arriba,
hacia el Divino para lograr inspiración, la otra apuntando hacia la
Tierra para descargar esa potente energía. [Nota] Sus habilidades parecen
mágicas a veces porque sus deseos lo ayudan a conseguir lo que parecen
ser milagros.
¿Qué hace al Mago tan poderoso? Primero, él no tiene
miedo de actuar. Él cree en sí mismo y está deseando
poner esta creencia en evidencia. El sabe también qué intenta
hacer y porqué. El no duda porque comprende su situación exactamente.
El Mago puede focalizar con una determinación unilateral. En cuanto
él recuerda la fuente divina de su poder, el Mago persiste en ser un
gran conductor para los milagros.
En una lectura, el mago implica que las fuerzas primas de la creatividad son
tuyas si tú puedes aclamar por tu poder y actuar con conciencia y concentración.
Esta tarjeta es una señal para actuar y actuar ahora, en la medida
en que tú entiendas exactamente que quieres y estés dispuesta
a conseguirlo.
Si hay alguien parecido a Bernie Miller, ése es el Mago. Aunque tiene
un airecillo de Miguel Ángel...
Es el Arcano II. Es el Símbolo de la Autoconciencia o Mente Objetiva.
Es la mente que planea, que está atenta. Sobre su mesa de trabajo esotérico
se encuentran los Oros, las Copas, los Bastos y las Espadas, los 4 Elementos
Primordiales. (Los Cristianos hacen la Señal de la Cruz, invocando,
casi siempre sin saberlo, a los 4 Elementos, los 4 Puntos Cardinales...).Con
su brazo derecho levanta la Vara Mágica (la misma de los cuentos de
Hadas¡¡¡), que cuando alguien practica rituales, sabe construir
( por dentro debe llevar un "alma" de cobre u otro metal para transmitir
la Energía, debe ir pintada con los 7 Colores Básicos, debe
tener ciertas dimensiones, etc...).La izquierda señala con el signo
universal de "¡atención¡¡" hacia el suelo
fértil, hacia la Madre Tierra. Es igual Arriba, el Cielo, que Abajo,
la Tierra. El Jardín, lleno de Rosas y de Lirios, es el Subconsciente
de donde proceden los Poderes ocultos que todos poseemos, pero que sólo
los Iniciados conocen y utilizan...¡¡
Los Lirios representan 4 aspectos de la Verdad, y las Rosas son el Deseo,
son 5, ( en el Mago del Rider Waite, el de la Izquierda), pues todo deseo
nace de uno de los 5 sentidos. El Mago cultiva su Jardín, lleva a las
Rosas y a los Lirios más allá de lo que la Naturaleza hace...El
Mago es un Transformador, un Permutador de la Experiencia Observada...La frase
de El Mago es "yo quiero"... ese "yo quiero" debe estar
precedido del conocimiento consciente, del manejo de los Elementos...su letra
es Beth, Casa. El Mago es el hombre que se aproxima a la Verdad, al Conocimiento,
serenamente, sin solemnidades estrafalarias, sin perder su buen humor, sin
dejar de ser una persona normal, sin aparatosas poses de "sabio",
con humildad, pasando desapercibido, con la Risa, como el Mono símbolo
de la Sabiduría en la India y entre los Mayas, vence viejos prejuicios
y demuele antiguos paradigmas...El Mago nos enseña a aprender y a disfrutar
del Conocimiento, no a posar de "sabios ". Para los Masones, nuestro
papel de Mago es claro: somos sólo Albañiles al servicio de
la Gran Obra, dirigida por el Gran Arquitecto del Universo...somos canalizadores
de Energía, los Transmisores entre lo Increado (concebido) y la Creación...
Sobre la cabeza de El Mago vemos el Símbolo de Infinito, de Trascendencia...el
Símbolo de la Iniciación...
ARCANO II (LA SUMA SACERDOTISA)
LA SACERDOTISA
Carta II del Arcano Mayor
La Sacerdotisa es la guardiana del inconsciente. Ella se sienta en frente
del delgado velo de la improvisación, la cuál es todo lo que
nos separa de nuestro paisaje interior. Ella contiene dentro de sí
misma los secretos del reino y nos ofrece una invitación silenciosa,
"permanece quieto y sabe que yo soy Dios"
La Gran sacerdotisa es el principio femenino que balancea la fuerza masculina
del Mago. El arquetipo femenino en el tarot está dividido entre La
Sacerdotisa y la Emperatriz. La Sacerdotisa es el desconocido misterio que
suele representar la mujer, especialmente en culturas en las cuáles
se da importancia a lo tangible y lo conocido. La Emperatriz representa el
rol de la mujer como crucial en la vida. En las lecturas, La Gran Sacerdotisa
propone un desafío para que Ud. vaya más a lo profundo - ver
más allá de lo obvio y superficial, lo oscuro y lo oculto. Ella
también le pide a Ud. que llame a la enormidad de su potencial y que
recuerde las posibilidades ilimitadas que Ud. tiene en sí mismo.
La Sacerdotisa puede representar un momento de espera y permisividad. No es
siempre necesario actuar para conseguir nuestros objetivos. Algunas veces
ellos pueden ser realizados a través de una pausa que da una oportunidad
al deseo de florecer dentro de la plenitud del tiempo.
La Suma Sacerdotisa es la Clave número tres ( aunque aparece un II,
es la III debido a que El Loco es la clave 0).
Está sentada entre dos columnas, familiares para los Masones. Es la
representación de la Subconciencia o Mente Subjetiva Profunda. Está
sentada, es pasiva, receptiva y virginal. Sobre su regazo descansa La Tora,
registro del pasado. Ella conoce el devenir pasado, presente y futuro. A sus
espaldas está el velo de Isis. Bajo sus pies y sobre su cabeza está
la Luna. Los pliegues de su manto azul se convierten en una corriente de agua.
Es una carta de ubicación en el Tiempo. Nos enseña a hacer uso
del inmenso arsenal de información que se encuentra en nuestro subconsciente.
Sus frases son Yo veo, en el plano físico, y Yo sé, en el mental.
A la Suma Sacerdotisa están ligadas las Siete Leyes del Universo: la
de Asociación; la de Vibración, insinuada por los pliegues del
manto; la de Correspondencia, que nos enseña a conocer los Símbolos
para usarlos en nuestro perfeccionamiento, como en la Masonería, por
ejemplo; la del Ritmo, simbolizada por los cuartos menguantes de la luna a
los pies y sobre la cabeza, en la cual también está una luna
llena. La de Polaridad, simbolizada en las dos columnas, símbolos de
los opuestos y que aparecen en varios Arcanos; severidad y misericordia, extremos
del comportamiento humano, que se neutralizan en la columna de la Armonía
o columna del medio en el Árbol de la Vida. La de Causa y Efecto, simbolizada
por el pergamino que contiene La Tora. Nada es casual, todo tiene su explicación
y sus consecuencias. La de Generación, simbolizada por la corriente
de agua que emana de su vestido.
Esta Clave es la llave por excelencia del Conocimiento Subconsciente, en donde
reside el verdadero secreto masónico...
ARCANO III (LA EMPERATRIZ)
LA EMPERATRIZ
Carta III del Arcano Mayor
La Emperatriz y La Gran Sacerdotisa son las dos mitades del arquetipo femenino
en la arcana mayor. La Emperatriz representa la Madre fértil que da
la vida la cuál reina sobre la naturaleza y los ritmos de la Tierra.
De ella vienen todos los placeres y alegrías de los sentidos y la abundancia
de la abundancia de la vida en todas sus formas. La Emperatriz le da coraje
para que fortalezca sus conexiones con el mundo natural el cual es la base
de nuestro ser. Demasiado seguido, falsas sofisticaciones y placeres nos llevan
lejos de nuestras raíces. Dejemos que la Emperatriz nos recuerde mantener
los pies plantados firmemente sobre la Tierra.
En las lecturas, la Emperatriz puede referirse a cualquier aspecto de la Maternidad.
Ella puede ser una madre individual, pero como una Carta Arcana Mayor, ella
también va más allá de las tareas específicas
de la madre en su esencia - la creación de vida y su mantenimiento
a través de amor cuidadoso y atención.
La Emperatriz puede también representar la abundancia de todo tipo.
Ella ofrece una cornucopia de delicias, especialmente aquellas de los sentidos
- comida, placer y belleza. Ella puede sugerir recompensa material, pero solo
con la comprensión de que las riquezas van con un espíritu generoso
y abierto. La Emperatriz le pide a Ud. que abrace el principio de la vida
y disfrute de sus bondades.
El Arcano III es una Venus nacida del mar. Está embarazada, es la Imaginación
Creativa.
Su letra es DALETH, Puerta. Su frase es Yo hago, Yo creo (de crear, no de
creer). Está sentada en un Jardín, su cabeza coronada de 12
estrellas, su túnica sembrada de frutos y semillas fértiles,
y a sus pies las Espigas, que nos recuerdan a los masones ciertas palabras
de cierto grado, en el que hay creatividad, estudio. Cada espiga es idéntica
a las demás. El gran fruto abierto con el símbolo de la fertilidad
femenina en su centro. El cetro levantado con la esfera de oro en su extremo
nos enseña que es poderosa la Imaginación. La Emperatriz es
también la Madre Naturaleza, la fuerza creadora, el amor, la generosidad,
el placer de vivir...es Venus...
ARCANO IV (EL EMPERADOR)
EL EMPERADOR
Carta IV del Arcano Mayor
La figura del Emperador dice mucho acerca de las cualidades esenciales de
esta Carta. Nosotros vemos una figura severa y comandante sentada en un trono
hecho en un bloque de piedra. Su espalda está erguida, y su mirada
se clava en la nuestra directamente. Él tiene confianza en su completa
autoridad para reglar.
El Emperador representa estructura, orden y regulación - fuerzas que
balancean la abundancia pródiga y de libre flujo de la Emperatriz.
Él evoca un mundo de cuatro cuadrados donde los trenes llegan a tiempo,
los juegos son hechos bajo sus reglas, y los oficiales comandantes son respetados.
En situaciones caóticas, el Emperador puede indicar la necesidad de
organización.
Los extremos sueltos deberían atarse, y los elementos caprichosos,
ordenados. En situaciones que están descontroladas, él sugiere
el efecto limitante de estas restricciones.
El Emperador puede representar un encuentro con la autoridad o él haber
obtenido el poder y el control. Como el regulador, el normalmente está
asociado con problemas legales, acciones disciplinarias, y el oficialismo
en todas sus formas. El también puede ser un padre individual o un
arquetipo de Padre en su rol de guía, protector y proveedor.
El Arcano IV, el Emperador. Es la Razón. Su frase es: "Yo comprendo".
Es el discernimiento, la visión mental. Su letra es HEH, Ventana. Es
la Visión, simbolizada por el fondo naranja de esta carta. Está
regido por Marte, simbolizado en su armadura, y Aries, simbolizado por las
cabezas de Carnero de su Trono. El Emperador, IV, sigue a la Emperatriz, el
Arcano III, pues un Hombre no puede ser amo de su casa sin su Mujer que es
la que dará los Hijos, es decir, la Generación de Imágenes
mentales a nivel consciente (La Emperatriz) es un precursor de la Razón,
el Emperador. Es el Arcano de la Comprensión Racional y Equilibrada
del Mundo.
Masónicamente, el Emperador tiene gran significado: la piel blanca
del carnero, Aries, es símbolo de la inocencia, de la corta edad del
Aprendiz masón, representada en su mandil. Aries es el primer signo
del año zodiacal..
En su mano derecha porta un "ankh" egipcio, símbolo del amor
y la bondad. Es un anciano bondadoso, pero poderoso. O poderoso, pero bondadoso.
La armadura de El Emperador nos protege del error. El Emperador impera, ordena,
manda. Pone en orden nuestra mente y nos hace discernir sobre la importancia
que debemos darle a cada asunto. Es anciano y sabio. En su mano izquierda
muestra el Oro magnífico, el oro de los Alquimistas. El producto de
la Gran Obra.
Nos enseña a ser cuidadosos y ordenados. La mediocridad, la superficialidad,
el apresuramiento en los juicios hacia los demás, la ignorancia, son
todos errores que el Emperador nos enseña a eliminar. Nada en el Cosmos
es Caótico, todo está ordenado por el Gran Arquitecto del Universo,
y El Emperador así nos lo está diciendo. "Ordo ab Chao",
antiguo lema masónico.
La vida humana no puede ser ajena a este Orden, es parte de él.
El Emperador nos ordena deshacernos de nuestros prejuicios, registrar nuestros
éxitos y fracasos y convertir éstos en enseñanzas. Así
podremos avanzar hacia las montañas que vemos tras el Trono, cruzaremos
el Río que está a los pies de ellas, el mismo Río que
brotó del vestido de la Gran Sacerdotisa.
ARCANO V (EL SUMO SACERDOTE)
EL SUMO SACERDOTE (EL HIEROFANTE)
Carta V del Arcano Mayor
Excepto en casos raros, cada ser humano crece y se desarrolla dentro de una
cultura. Nosotros aprendemos viviendo con otros. El Sumo Sacerdote representa
tal aprendizaje de oficio, especialmente en grupos. Un Sumo Sacerdote es alguien
que interpreta los conocimientos secretos. En esta Carta vemos una figura
religiosa en una iglesia formal. Él viste las vestimentas elaboradas
de este oficio. Su objetivo es llevar a los dos iniciados dentro de la iglesia
de modo que ellos puedan asumir los roles establecidos.
Además de las iglesias, hay escuelas, clubes, equipos, compañías,
y sociedades. El Sumo Sacerdote representa a todos ellos porque su reino está
estructurado en grupos con reglas y roles asignados. Tales entornos enfatizan
sistemas de creencias - hechos, reglas, procedimientos, y rituales. Los miembros
están protegidos por normas. Ellos desarrollan una identidad de grupo.
El Sumo Sacerdote es una de las tres cartas que apuntan al grupo. (El 3 de
Copas y el 3 de Bastos son las otras).
En las lecturas, el Hierofante a menudo representa el aprendizaje con expertos
o maestros del conocimiento. Esta carta también da cuenta de las instituciones
y sus valores. El Sumo Sacerdote es un símbolo de la necesidad de adaptarse
a las reglas o a situaciones prefijadas. Su apariencia en una lectura puede
mostrar que Ud. está luchando con una fuerza que no es innovativa,
libre de espíritu o individual. Los grupos pueden ser enriquecedores
o sofocantes, dependiendo de las circunstancias.
Algunas veces necesitamos seguir un programa o abrazar la tradición,
otras veces necesitamos confiar en nosotros mismos.
El Arcano V, el Hierofante o Sumo Sacerdote, imparte enseñanzas a dos
Adeptos (sus tonsuras así lo simbolizan), sentado entre las dos columnas
que nos son familiares pues aparecen en otros Arcanos..Son la ley de la Polaridad.
La frase clave del Sacerdote es "yo oigo". Los dos Adeptos son el
Deseo y el Conocimiento, el primero simbolizado por las rosas rojas de las
vestiduras del Adepto de la izquierda, y el segundo por los lirios blancos
de las del de la derecha. Su letra es VAV, que significa Clavo. El Hierofante
es el mismo Emperador (Arcano IV) asumiendo papeles distintos. El Hierofante
es la elaboración subconsciente de la clasificación u ordenación
de nuestras vidas que nos dicta el Emperador. Cuando esa elaboración
es transmitida al consciente, resultan las Intuiciones que se convierten en
sugestiones e inician una nueva serie de deducciones .La Intuición
es también una instrucción emanada de nuestro Maestro Interior
y materializada por el Hierofante. Jung llama a esa región de la mente
"el inconsciente colectivo", en donde se resumen las experiencias
de la Humanidad, que vamos heredando y que el Tarot, Sabiduría Milenaria,
compendia en sus 22 Arcanos Mayores.
El Hierofante es la voz interior que nunca lisonjea, que jamás nos
hace promesas acarameladas... (Pobres marxistas que consideran la Consciencia
"como el déspota que todos llevamos dentro¡¡").
El Hierofante es la voz del Silencio que el Aprendiz masón aprende
a escuchar por encima del ruido de las otras voces distractoras es la voz
que nos llama a continuar por la Senda Iniciática, en Silencio, con
Humildad, con la Alegría del Loco y del Niño de El Sol...el
Ermitaño nos guiará para hacer realidad las enseñanzas
del Hierofante.
El Hierofante es una Carta útil para acompañar la meditación
de las demás.
El Hierofante muestra en su mano izquierda el Báculo del Mago coronado
por las Siete Leyes, que el conoce y nos enseña,.aunque la intuición
va más allá de la razón, no la sustituye. En términos
del tarot, el Hierofante, la Intuición, sigue al Emperador, la Razón,
son el mismo personaje y no el uno sustituto del otro.
Su mano derecha señala hacia Oriente, hacia el Sol, fuente de la Vida.
La meditación con el Hierofante nos dará la respuesta a problemas
aparentemente insolubles...el precio que debemos pagar por este Secreto es
guardar Silencio.
El Hierofante posa sus pies sobre un Cubo, símbolo de la perfección,
en el que están las Llaves de oro del Conocimiento. Tanto él
como los Adeptos lucen la Tau de El Colgado, el Árbol de la Vida. El
Cubo está asentado sobre un piso ajedrezado, tan familiar para los
Masones, los Opuestos, la Polaridad.
ARCANO VI (LOS ENAMORADOS)
LOS ENAMORADOS (LOS AMANTES)
Carta VI del Arcano Mayor
Los Enamorados es una carta que es fácil de recordar. El amor y el
sexo son temas muy conversados, y como Ud. podría esperar, esta carta
los representa a ambos. La urgencia de unión es poderosa, y, en su
máxima expresión, nos lleva más allá de nosotros
mismos. Esto es por lo cuál un ángel bendice la unión
entre el hombre y la mujer en esta carta.
En lecturas, esta carta a menudo se refiere a la relación que está
basada en el amor profundo - la fuerza más poderosa de todas. La relación
puede no ser sexual, aunque a menudo lo es o podría serlo. Mas generalmente,
Los Enamorados pueden representar la fuerza atractiva que lleva a dos entidades
a unirse en una relación- ya sea gente, ideas, eventos, movimientos
o grupos.
Esta carta también da cuenta de la dureza de la toma de decisiones
y el cuestionamiento que ello conlleva. En algunas barajas, los Enamorados
muestran un hombre desgarrado entre dos mujeres - una virgen y una provocadora.
Este triangulo más bien antiguo, simboliza los grandes dilemas que
enfrentamos cuando somos tentados entre lo correcto y lo incorrecto.
Los Enamorados pueden indicar encrucijadas morales o éticas - un punto
de decisión en el cuál Ud. debe elegir entre el camino alto
y el bajo. Esta carta puede también representar creencias personales
porque para tomar tal decisión Ud. debe saber dónde está
parado. Seguir su propio paso puede significar ir en contra de aquellos que
lo están "apurando" en una dirección que para Ud.
es incorrecta.
El Arcano VI, los Enamorados o Los Amantes, es la carta de la discriminación,
la que separa, la que pone aparte. Pero precisamente por eso, es la carta
de la unión. Su letra es ZAIN, Espada. El Arcángel Rafael, la
Superconsciencia, regente de Mercurio, Géminis, está flotando
sobre los amantes, que totalmente desnudos están de frente al observador,
a diferencia de los Adeptos del Hierofante. Detrás del Hombre está
el Árbol con los doce signos zodiacales, y detrás de la Mujer,
el árbol con los 5 frutos que simbolizan los sentidos, y enroscada
en él, la fuerza oculta de la Serpiente, el kundalini. La Superconsciencia
derrama por igual su influjo sobre la subconsciencia (la Mujer) y la Auto-
Consciencia (el Hombre). Los Amantes están desnudos, pues cuando los
dos aspectos de la Consciencia se equilibran con la Superconsciencia, desaparecen
los encubrimientos y la hipocresía, que son la causa de las perturbaciones
mentales. Los dos aspectos de la personalidad son diferentes e iguales al
tiempo, ninguno es mejor que el otro. Todos los Pares de Opuestos, por antagónicos
que parezcan, son complementarios. Debemos separar para unir después
con la Fuerza del Amor, que es el impulso primordial que le impele movimiento
a la Historia, a la Vida. Debemos hablarle cariñosamente a nuestro
subconsciente conscientemente, él es nuestro Amante, como lo expresa
El Cantar de los Cantares.
ARCANO VII (EL CARRO)
EL CARRO (LA CARROZA)
Carta VII del Arcano Mayor
Imagine a Julio Cesar conduciendo su carro triunfal entrando a Roma. El ha
vencido a sus enemigos y conquistado vastas, nuevas tierras. Este es el espíritu
del Carro; Esta carta representa las victorias que son posibles a través
del poder de la voluntad y de la auto-maestría. Una imagen militar
es apropiada para El Carro porque esta carta da cuenta de las fuerzas asociadas
con el combate - disciplina, coraje, determinación y firmeza.
El Carro representa el aspecto positivo del ego. Un ego saludable es aquel
que es fuerte y seguro de sí mismo. Él sabe lo que quiere y
cómo lograrlo. Podemos enojarnos cuyo ego es demasiado saludable, pero
en general buscamos a esa persona cuando necesitamos que alguien nos guíe
en los momentos difíciles. Nosotros sabemos que él o ella no
nos defraudarán.
En las lecturas, El Carro suele aparecer cuando el control estricto está
o podría estar presente.
En su mejor expresión el control estricto no es brutal, pero sí
firme y directo. Está fundamentado por un fuerte deseo y una gran confianza.
El Carro puede significar auto control o control del entorno. Esta carta también
representa victoria. Hay muchos tipos de victorias; El Carro es del tipo ganar-
perder. Su éxito es el resultado de vencer en la competición
para llegar a ser el número uno. Tales momentos son gloriosos en las
circunstancias adecuadas.
El Carro, arcano VII, es de suma importancia para los Masones, quienes en
él vemos muchos símbolos que tan caros nos son en nuestra Orden.
El Auriga es el Yo interno, las riendas son la mente, las esfinges (una negra,
otra blanca, los Opuestos, siempre los Opuestos¡¡¡ Observad
que la esfinge Negra es masculina y la Blanca femenina, Consciencia y Subconsciencia..)
son los sentidos que jalonan el carruaje, que es el Cuerpo. Su letra es Cheth
que significa Valla. Nos enseña quiénes somos y nos da elementos
para guiar nuestra voluntad en consonancia con los designios del Gran Arquitecto
del Universo. Nos ayuda a aclarar nuestro papel en la Gran Obra.
Esta Clave representa la conquista de la Ilusión. Observad sobre el
escudo, frente a la carroza, el "lingam-yoni" de los Hindúes,
que simboliza la unión de las fuerzas sexuales opuestas, dándonos
sentido de protección y síntesis psíquica.
Hay dos ideas centrales sugeridas por la Carroza: Receptividad y Voluntad.
Para los masones el 7 significa, entre otras cosas, la Maestría, Consumación,
Seguridad, Conquista, Paz y Protección. Los sentidos están controlados
por las riendas invisibles del Auriga, observad su semblante sereno, en paz.
La receptividad nos recuerda la máxima milenaria "si no os hacéis
como niños no entraréis en el reino de los Cielos", pero
la Carroza también nos ha permitido liberarnos de influencias dañinas
que desde niños hemos recibido...de nuevo dejamos tirado por ahí
al Hombre Viejo...La Carroza estuvo jalonada por los Sentidos, pero éstos
ahora reposan, las riendas los han amansado, el Auriga sostiene en su mano
derecha la vara Mágica de El Mago. Ello quiere decir que con esta carta
termina el primer septenario del tarot, que por lo mismo sintetiza a las Claves
anteriores: el Mago (la varita), es la Autoconsciencia; la Sacerdotisa, simbolizada
por las medias lunas sobre los hombros del Auriga, recordemos que es la Subconsciencia;
y las Estrellas nos recuerdan a la Emperatriz, las Imágenes mentales
que materializa el Emperador (la Corona y el Pectoral del Auriga), la razón,
todo lo cual nos faculta ahora para probar nuestras intuiciones (el Hierofante),
llegando a percibir las diferencias entre autoconsciencia, subconsciencia
y superconsciencia (los Amantes, el lingam-yoni).
El Carro nos enseña que nuestra Voluntad es sólo una expresión
particular de la Gran Voluntad Cósmica, del Orden, de los designios
del Gran Arquitecto del Universo. Per se nos han dado las riendas, nuestra
mente, para entender cuál es el camino a seguir en la Gran Obra. El
Auriga ha dejado atrás la Ciudad, ha vadeado el Río y ahora
reposa. Es la Maestría. Sólo los Hombres Libres y de Buenas
Costumbres (los que han dominado las Esfinges y el Carro, o sea, los Sentidos
y el Cuerpo), cumplen 7 años...
ARCANO VIII (LA FUERZA)
LA FUERZA
Carta VIII del Arcano Mayor
Normalmente nosotros pensamos en Fuerza en términos físicos
- grandes brazos, piernas poderosas - pero también hay fuerzas internas.
Las fuerzas internas vienen de un ejercicio del músculo del corazón.
Es perseverancia, coraje, resolución y compostura - cualidades que
nos ayudan a endurecernos cuando los tiempos son duros. En el pasado, una
persona con fuerza interna era comúnmente considerada una persona de
carácter; él o ella podía ser tenida en cuenta en los
peores momentos. La Fuerza representa esta energía de clara determinación.
La fuerza no es una carta ligera, sino es sólida y confiable.
La Fuerza también representa paciencia y compasión. Enojarse
es fácil cuando los acontecimientos se tornan amargos, pero manejando
la frustración con calma, se logra una gran Fuerza. También
se logra aceptando a los demás, y perdonando errores. Nosotros necesitamos
Fuerza para moldear las situaciones suavemente. El Carruaje controla a través
de la maestría y la autoridad. Esta carta es más sutil, hasta
amorosa. Note cómo el león (de por sí un símbolo
de fuerza) está siendo guiado y domesticado por las manos suaves de
una mujer.
La Fuerza aparecerá en la lectura cuando sus cualidades sean necesitadas.
Puede ser un recordatorio para no desesperar o abandonar. Ud. tiene la fuerza
interior para fortalecerse y triunfar. Si Ud. está presionando con
mucha fuerza, necesita retirarse por el momento y ser paciente. Si otras personas
o circunstancias lo están volviendo loco, recuerde la fuerza que viene
del amor y la tolerancia. Ella lo acompañará en los momentos
más duros.
La Fuerza es el Arcano VIII, con el que se inicia el segundo septenario del
tarot, el de la lucha con nuestro ego, el de la interiorización de
los principios simbolizados en los 7 anteriores Arcanos. El Arcano VIII, la
Fuerza, en barajas diferentes a la Rider Waite, es el Arcano XI (tal como
se muestra en la figura). Ese detalle no importa para los fines de meditación
que pretendemos aquí, pues de todas maneras ambos Arcanos están
dentro del mismo septenario
La letra de la Fuerza es TETH, Serpiente.
Una mujer dulce y bella abre suavemente, sin esfuerzo casi, las fauces de
un león "encadenado" a un collar de rosas. Nuestro subconsciente,
la Mujer, debe dominar al león, nuestra mente y emociones, que son
fuertes... aparentemente...son un león atado a un collar de rosas.
Esta mujer tiene sobre su cabeza el símbolo de infinito, es la Iluminación,
tema de este segundo septenario: la Iluminación no se "aprende"
por ahí en recetarios y manuales, es una profundísima experiencia
que sólo quien la vive la conoce y no puede comunicarla, aunque lo
deseara, ello hace parte del Secreto que debido a la ignorancia y la intolerancia,
le ha acarreado a la Masonería tantas persecuciones y desdichas. El
Secreto que un Iniciado lleva en su espíritu es incomunicable e indestructible,
ni las excomuniones, ni las persecuciones, ni ninguna fuerza humana pueden
arrebatarle al Iniciado su Secreto. Cuando decimos, por ejemplo, que la Masonería
es "elitista" es en el sentido de que no cualquiera que pase por
ahí será un Iniciado: necesita de unas herramientas que le darán
la Fuerza para enfrentarse a sí mismo y avanzar, ¡qué
distinto esto del "elitismo" de los clubes sociales.
La Fuerza es la suma de todas las cualidades que necesitaremos para emprender
el camino del segundo septenario, la Iluminación, como ya se dijo.
En el Arcano VII alcanzamos la Maestría, ahora vamos a desarrollarla,
debemos crear una nueva personalidad, por eso la frase de la Fuerza es "Osar"
"Atreverse". Debemos enfrentarnos a nosotros mismos con calma y
sin miedo.
El Mago, masculino, y la Fuerza, femenina, tienen ambos el Infinito sobre
su cabeza. El Mago inicia el primer septenario, la Fuerza el Segundo, es decir,
esta inversión de sexo significa que se han conjugado los aspectos
arquetípicos, los dos principios, masculino y femenino. El compromiso
de El Mago con la vida se ha modificado por la paz interior que le ha dado
la Gran Sacerdotisa. Los instintos naturales y las pasiones representadas
por la Emperatriz, los lleva la Fuerza en el cinturón de rosas y su
cabellera rubia. La Fuerza canalizará todas estas energías hacia
nuestro perfeccionamiento espiritual.
Se expreso una cosa aparentemente contradictoria: "la Fuerza abre sin
esfuerzo las fauces del león", esa es la clave interpretativa
de este Arcano.
ARCANO IX (EL ERMITAÑO)
El HERMITAÑO
Carta IX del Arcano Mayor
El hermitaño tradicional es un personaje barbudo, duro, que se ha retirado
de la compañía de los hombres para vivir una vida de reclusión
y pena. Esta carta representa este concepto. El Hermitaño representa
el deseo de escapar del tener y gastar de la sociedad para focalizar la atención
en el mundo interior. El busca respuestas dentro y sabe que ellas llegarán
sólo con paz y soledad.
Llega un punto en la vida en el cuál comenzamos a cuestionar lo obvio.
Sentimos que hay una realidad más profunda y comenzamos a buscarla.
Esta es una búsqueda solitaria ya que las respuestas no se hallan en
el mundo externo, sino en nosotros mismos. El Hermitaño en la Carta
9 nos recuerda a Diógenes, el Griego ascético que se dice fue
con una linterna en la mano a buscar un hombre honesto. Diógenes es
el símbolo de la búsqueda de la verdad que el Hermitaño
espera descubrir eliminando las distracciones.
En las lecturas, El Hermitaño suele sugerir la necesidad de tiempo
- un período de reflexión en el cuál las distracciones
sean limitadas. En tiempos de acción y alta energía él
representa el centro de calma que debe ser creado para el balance. Él
puede también indicar que en algún momento es necesario o aconsejable
retirarse. Además, el Hermitaño puede representar búsquedas
de todo tipo, especialmente para un entendimiento más profundo de la
verdad de una situación.
"Busca", y "encontrarás", se nos ha dicho, y entonces
el hermitaño será nuestra guía. Podemos recibir ayuda
de maestros sabios, y a cambio, ayudar a otros a medida que nosotros progresamos.
El Arcano IX, el Ermitaño, es una de las Claves más alegóricas
del Tarot. En algunos Tarots Medievales, como el Marsellés, se le llama
Diógenes, por la similitud con la búsqueda de un Hombre que
con una linterna emprendió aquel sabio.
El Ermitaño no mira hacia la derecha, como la mayoría de los
Arcanos, sino a la izquierda y hacia abajo, ya coronó la Cima del Saber
e ilumina con su Linterna (en la que vemos la Estrella de David, el Hexágono
o los Dos Triángulos contrapuestos, Lo Material y lo Espiritual, la
Escuadra y el Compás Masónicos), el camino a los que vienen
detrás escalando la Montaña, a los Iniciados, que venciendo
obstáculos, han emprendido el duro ascenso hacia la Cima del Conocimiento.
Es la Figura del Maestro Masón, aquel verdadero Maestro que enseña
a los Aprendices. Es un Solitario, a su alrededor sólo hay oscuridad
y sombras allá abajo, pero con su luz las disipa. Domina su Voluntad
y hace efectiva la del Creador. Su letra es YOD, la Mano del Hombre. Ha logrado
el conocimiento de su Yo Central, es la figura del Maestro Interior. Su luenga
barba nos da idea de su Experiencia. El Ermitaño, aunque vive apartado
de la sociedad, da refugio, cobijo, alimento y consejos al Viajero. Karl Jung,
nuestro hermano masón, gran psicoanalista, cuya obra sobre el Tarot
debería ser de obligado estudio para todo Masón, nos da muchos
ejemplos de sueños con figuras como el Ermitaño, indicio de
nuestro Maestro Interior.
Su ropaje gris representa la neutralización de los Opuestos. Su báculo
corresponde a la Voluntad y al Mundo Arquetípico. Su número,
el Nueve, significa la consumación de la Maestría, ya puede
mirar hacia abajo, hacia el camino recorrido. El Ermitaño nos enseña
que para alcanzar la Sabiduría debemos retirarnos de lo Profano, al
menos durante unos minutos al día. Es la Meditación, es el Estudio
y para ello es necesaria la Soledad .Aquella Soledad que en su Silencio, debe
aprender a amar el Aprendiz Masón.
ARCANO X (LA RUEDA DE LA FORTUNA)
LA RUEDA DE LA FORTUNA
Carta X del Arcano Mayor
En la mitología Griega, hay tres mujeres conocidas como las que mueven
el Destino. Ellas son responsables de girar el destino de cada persona en
el momento de su nacimiento. No es sorprendente que ellas sean las que giran
la rueda de la fortuna, ya que ésta es una imagen apta para simbolizar
las vueltas del destino. Este es el tema de esta Carta particular.
La Rueda de la Fortuna es una de las pocas cartas en la arcana mayor que no
tiene una figura humana como un punto focal. Esto es porque su centro está
sobre la figura del hombre - en los niveles más altos (nubes) donde
los destinos de todos son entretejidos en la palestra de la vida. El tarot
reconoce que cada persona establece su propio camino en la vida, pero también
está sujeta a los ciclos mayores que la incluyen. Nosotros experimentamos
eventos al azar que parecen ser accidentes, aunque ellos son parte del gran
plan.
En lecturas, la Rueda de la Fortuna puede indicar una visión o realización
que golpea con mucha fuerza. Si Ud. ha estado pasando por un problema o una
situación dura, esta carta puede señalar que Ud. va a encontrar
la respuesta si da un paso atrás y ve todo desde una perspectiva mejor.
La Rueda de la Fortuna también representa encuentros inesperados y
giros del destino. Ud. no puede predecir las sorpresas; Ud. sólo puede
estar atento cuando la sorpresa está girando a su alrededor. Efectivamente,
esta carta sugiere muchas veces, acciones semejantes al giro de la rueda -
cambios en dirección, ciclos que se repiten y movimientos rápidos.
Cuando la energía de la Rueda llegue, Ud. sentirá que su vida
se acelera y será tomado en un ciclón que puede depositarlo
en cualquier lado. "Gira y gira y gira, y dónde para, nadie lo
sabe".
El Arcano X, la Rueda de la Fortuna. Su palabra clave es Rotación.
Su letra es KAPH, la mano que agarra. El movimiento rotatorio de la Luz Ilimitada
forma el Universo. La Rotación origina todos los cambios de la Vida
en el Cosmos y en nosotros, parte de él. Para los Masones es muy importante
la meditación con este Arcano: en sus cuatro extremos están
el Hombre, el Toro, el León y el Águila (Saber, Querer, Osar
y Callar).
La Rueda es símbolo del ciclo completo de la expresión cósmica.
La Serpiente amarilla que ven es la expresión de la Involución
de la energía cósmica, es la Vibración. El dios egipcio
Annubis parece sostener sobre sus espaldas la Rueda: es la Evolución
de la Consciencia. La Esfinge sobre la Rueda, es el YO del Hombre que ha terminado
su evolución.
Las letras romanas en la Rueda forman las palabras ROTA (Rueda) y Taro (Tarot)
y Tora (La Tradición, la Ley Sagrada), ATOR, latinización de
la diosa Hator, que no es otra que Venus. Algunos esoteristas afirman que
la Rueda se puede leer con esta frase: En la Rueda del Tarot habla el Amor.
La Rueda contiene también las letras hebreas IHVH, que remiten al nombre
de Dios y a los 4 Elementos.
La idea de la Muerte y el Renacer están en la Rueda: la Serpiente también
representa a SET, que trajo la muerte al Universo; ANNUBIS, Guía de
las Almas Muertas y dador de nuevas vidas; y la esfinge es HORUS, dios de
la resurrección. Es el Ciclo Completo.
La rueda nos enseña que lo importante no es sólo el cambio en
sí mismo, sino nuestra reacción ante él. (En la adivinación
con el tarot, esta carta señala los "golpes de Suerte", como
sacarse la lotería, encontrar un amor, o sufrir una ruptura amorosa,
etc.).
Es de señalar un detalle: el número 10 es 1 y 0, Alpha y Omega,
el Principio y el Fin, el Ciclo Completo, la Rueda, Es el OUROBOROS.
La Rueda nos invita a meditar sobre la Vida y la Muerte, qué hacemos
con nuestro corto y valioso tiempo.
ARCANO XI (LA JUSTICIA)
LA JUSTICIA
Carta XI del Arcano Mayor
Representa una reserva de energía o sustancia sin estructurar, que
debe distribuirse con equilibrio y justicia.
Esta carta de sensación de rigor, aptitud para las matemáticas,
precisión, la búsqueda de un punto de equilibrio.
En el plano físico esta en contacto con la justicia humana, justicia
que da o quita, premia o castiga. En el plano divino: Justicia infalible (karmika)
fuera del tiempo. En síntesis: La Equidad.
El Arcano XI, la Justicia, aunque en barajas diferentes a la Rider Waite,
es el Arcano VIII (tal como se muestra en la figura). Ese detalle no importa
para los fines de meditación que pretendemos aquí, pues de todas
maneras ambos Arcanos están dentro del mismo septenario, el segundo,
que es el de la Iluminación. Puede presentar eso sí, dificultades
cuando se usa el Tarot con fines adivinatorios. Y de eso no estamos hablando
ahora.
Su letra es LAMED; que como enseñó Bernie, es Lengua, pero los
Maestros Mario y Daniel expresan que significa "aguijón para guiar
los bueyes".
Es el Equilibrio de los opuestos: cada acción tendrá una idéntica
y contraria reacción; o no hagas a otro lo que no desees que a ti te
hagan. La espada en alto es Discriminación, Juicio. Es Libra y porta
la Balanza en su mano izquierda, el Equilibrio. Coincide con la Emperatriz.
También está sentada entre las columnas que tan familiares nos
son a los Masones y a quienes hayan leído estos mensajes.
Al contrario de la justicia humana, la Justicia Cósmica NO es ciega,
tiene su ojo que todo lo ve permanentemente abierto, y nos dará estrictamente
lo que merecemos. No se equivoca jamás. El Error no existe en la Consciencia
Universal.
La Justicia es el concepto hindú de KARMA. Lo simbolizan el Círculo
y los Cuadrados que vemos en el pecho y la frente de la Justicia. También
simbolizan el movimiento espiritual dentro de nuestra materia corporal. Es
la cuadratura del círculo.
No olvidemos jamás que los Arquetipos, los 22 del Tarot, están
dentro de nosotros. Ellos son la Sabiduría Milenaria sobre la naturaleza
humana. El psicoanálisis junguiano lo que hizo fué "explicarla"
en términos que los occidentales llamamos "científicos",
recordemos que Karl Gustav Jung fué Masón, y de los buenos,
pero que un Egipcio de la época faraónica captaría de
un vistazo, es lo que lograremos cuando dominemos las técnicas de meditación
tarótica. La Justicia opera desde el fondo mismo de nuestros corazones,
de nuestra consciencia. A ella no podemos burlarla. ¿En dónde
podremos escondernos de los dictados de nuestro corazón. Esta idea
es conocida entre los Masones con la frase "obrar siempre entre Escuadra
y Compás", ahí está el equilibrio, el estado anímico
que todo Masón debe tratar de mantener. No debemos confundir "el
hacer cosas" con la "acción". Ésta es reflexiva,
nacida de la convicción iniciática de Resonar con el Cosmos,
de Unión con el Todo, eso es ser Masón.
El conocimiento de la Justicia nos abrirá el camino para entender la
Rueda de la Fortuna, Arcano X. El movimiento sin sentido, sin consciencia,
NO es acción, es sólo movimiento no consciente, es el vegetar,
es el vivir sin rumbo, es el causante del "stress", tan de moda
entre los profanos dedicados al consumismo, y de lo cual viven los mal llamados
"psicoanalistas", que cobran caro.
La idea es saber quiénes somos y qué hemos hecho de nuestras
vidas, no que un "analista" a sueldo nos lo diga, el Tarot, si aprendemos
a manejarlo, nos dará las Claves.
ARCANO XII (EL COLGADO)
EL COLGADO (EL AHORCADO)
Carta XII del Arcano Mayor
El Hombre Colgado es una de las cartas más misteriosas del Tarot. Es
simple, pero compleja. Atrae, pero también perturba. Se contradice
a sí misma de incontables maneras. El Hombre Colgado es desestabilizante
porque él simboliza la acción de la paradoja en nuestras vidas.
Una paradoja es algo que parece contradictorio, pero es verdad. El Hombre
Colgado nos presenta ciertas verdades, pero ellas están escondidas
en sus opuestos.
La principal lección del Hombre colgado es que nosotros "controlamos",
dejando ir - nosotros "ganamos", rindiéndonos. La figura
en esta Carta ha hecho la rendición fina l - morir en la cruz de sus
propios dolores de parto - aún él brilla con la gloria del entendimiento
divino. El se ha sacrificado a sí mismo, pero emerge victorioso. El
Hombre Colgado también nos dice que nosotros podemos "movernos
hacia adelante" permaneciendo quietos. Deteniendo el tiempo, nosotros
podemos tener todo el tiempo del mundo.
En lecturas, El Hombre Colgado nos recuerda que la mejor manera de encarar
un problema no es siempre la más obvia. Cuando nosotros más
queremos forzar nuestros deseos en alguien, es ahí cuando deberíamos
ceder. Cuando nosotros más queremos seguir nuestro propio camino, ahí
es cuando deberíamos sacrificarnos. Cuando nosotros más queremos
actuar, ahí es cuando deberíamos esperar. La ironía es
que haciendo estos movimientos contradictorios, encontraremos lo que estamos
buscando.
El Arcano XII, el Colgado. ¿No os recuerda el símbolo cristiano
de Pedro crucificado cabeza abajo? Es la Inversión del pensamiento,
aquel aparente "llevar la contraria". El Iniciado es un Colgado,
lleva la contraria al común de la gente en el sentido de que es considerado
un Loco, la letra griega Tau sirve de soporte al Colgado. Se observan los
doce signos del Zodíaco en las ramas podadas de la Tau, el Árbol
de la Vida. Está en reposo, como debemos estarlo para meditar en los
Arcanos Mayores. Es el Mago el que está Colgado. Está en Éxtasis,
de su cabeza iluminada brotan los 33 Rayos, la Edad Sublime, la Edad del Cristo,
la Edad Simbólica del Conocimiento Pleno, de la Sabiduría Iniciática,
los 33 Grados.
A pesar de estar en reposo, su posición nos da la idea de Péndulo,
el que ha oscilado a oriente y occidente y a norte y sur, ha recorrido los
Umbrales de la Luz y de la Oscuridad y es capaz de llevar el Sol a Occidente,
del latín "occidere", matar, que es en donde muere la Luz
el lugar del cielo por donde el Sol se despide de nosotros. Para el Colgado
ya no transcurre el Tiempo, es el Péndulo en reposo, ha alcanzado la
Atemporalidad que le da la Iluminación, ha alcanzado la Trascendencia,
proceso que culminará en el Arcano siguiente, el XIII, la Muerte, la
Maestría, con sus piernas forma un 4 invertido, los Elementos son manejados
por el Colgado y sus brazos dan la vuelta en círculo a su cuerpo, simbolizando
ambas posturas lo que los masones (neopitagóricos) llamamos "La
Cuadratura del Círculo". Su signo es Acuático, regido por
Neptuno, pues su letra es también MEM que significa Agua, somos hijos
del Sol engendrados en el Seno Acuático de la Madre Tierra.
El Colgado nos enseña a llevarle la contraria al Mal, a la Ignorancia,
al Error. Nuestra actitud en reposo, sabia, meditativa operará en esa
dirección.
ARCANO XIII (LA MUERTE)
LA MUERTE
Carta XIII del Arcano Mayor
Este arcano relacionado con la letra hebrea MEM, que representa el ambiente
biológico en que se manifiesta la vida.
Es el principio que transforma y renueva las cosas, el eterno movimiento destructor
de cualquier cristalización que sería una auténtica muerte.
Puede significar también muerte física, el espíritu que
se libera de la materia. Desde el punto de vista adivinatorio puede indicar
final necesario, tristeza, dolor, luto, descomposición, corrupción,
transformación total.
Para los conocedores de la interpretación del tarot, la Muerte significa
cambio, movimiento, transformación.
Es la liberación de nuestra conciencia de obstáculos y limitaciones
que impiden su libre desarrollo y expresión.
La Muerte porta en su estandarte la Rosa Blanca, símbolo del Amor Puro,
con sus 5 pétalos que hacen referencia a los 5 sentidos, a la inmortalidad
y al corazón.
El Sol que sale por Oriente nos sugiere la Resurrección. Se asoma por
en medio de dos columnas, la Misericordia y la Severidad. Delante de ellas
hay un gran río navegable, símbolo del Devenir y que, como todos
los ríos, muere en el Mar, símbolo de la Eternidad y de la Nada.
Las figuras complementarias, el Papa, el Rey, la Mujer, el Niño se
ven arrolladas "democráticamente" por la Muerte: ella nos
trata a todos por igual.
Sin la Muerte, no podría haber nada nuevo en el mundo. Cada muerte
aporta una nueva vida.
Esta carta marca el momento en que decidimos renunciar a nuestros viejos hábitos
y permitir que en nuestra conciencia se opere una profunda transformación.
El Arcano XIII pues, no es de "mala suerte". Por el contrario, es
el Arcano de la Nueva Vida. Los Maestros Masones que leen esto comprenderán.
Concluyo diciendo que este Arcano nos enseña que sólo quien
vence el temor a la Muerte, vencerá el temor a la Vida. Paradójicamente,
sólo puede ser feliz aquél que acepta plenamente que es efímero.
El Orden engendra el Caos, y el Caos engendra el Orden.
La figura no porta una guadaña, sólo su estandarte, emblema
del Amor Puro. Es una Muerte Implacable y Benévola, Esperanzadora.
Esta muerte cabalga tranquilamente, sin amenazar, su paso es decidido e imparable.
El Papa se yergue ante ella en actitud de súplica, que resultará
inútil. Ya el Rey ha caído, caerán la Mujer y el Niño.
La Muerte es Todopoderosa. Cabalga impávida hacia la derecha, hacia
el Oriente, en la misma dirección en la que discurre el Río:
hacia el Mar, hacia la Nada.
La Muerte, figura en movimiento, nos mira de frente. Porta una enorme Rosa
Blanca, el Amor Puro. Es una Muerte Amigable, Serena. L Muerte en el sentido
simbólico, alegórico, significa Iniciación.
ARCANO XIV (LA TEMPLANZA)
TEMPLANZA (LA TEMPERANCIA)
Carta XIV del Arcano Mayor
Hay ciertas personas que exudan una clase de serena compostura. Ellos pueden
no decir mucho, pero enfrentan sus asuntos con un aire de tranquila resolución.
Su presencia es confortable porque son muy centrados. Esa es la energía
de la Templanza.
Tener Templanza es mostrar moderación y auto-restricción. En
un mundo lleno de tentadoras indulgencias, es a menudo necesario encontrar
el punto medio. Sensible, puede ser, pero también un poco aburrido.
La energía de la Templanza puede parecer poco excitante en apariencia,
pero es la calma en el ojo del huracán. Todo alrededor son vientos
cambiantes, pero el centro hay todavía un punto que lleva todo a un
balance.
En lecturas, la Templanza puede representar una necesidad de moderación,
especialmente cuando cartas extremas están presentes (tales como los
Caballeros). Esta carta también puede indicar una necesidad de balance.
En situaciones conflictivas, la Templanza sugiere que la cooperación
y el compromiso son vitales. Busque cualquier oportunidad para juntar las
partes opuestas. En efecto, templar puede significar modificar agregando un
nuevo componente. Combinando y recombinando, puede aparecer la mezcla ideal
o la solución. La Templanza es la carta de la buena salud en todas
las áreas - física, mental y emocional. Cuando la enfermedad
o el disconfort aparecen, la Templanza mantiene la promesa de vitalidad y
bienestar.
Si uno tuviera una clave "personal", ésta sería la
de MAFF, esta clave se refiere a experimentación, a efectuar una mezcla
apropiadamente balanceada. Es el Equilibrio, es el sendero del medio o como
en Masonería se dice, la Cámara del Medio. Es la carta de los
Alquimistas y Masones Operativos. Su letra es SAMEKH y significa apuntalar,
verificar.
Observad la carta: el Ángel Guardián, Miguel, (que significa
en griego ¿Quién como Él?), el espíritu del Fuego
y del Sol, lleva sobre su túnica el nombre sagrado del TETRAGRAMMATON
y representa al Yo Superior. En su frente lleva el símbolo de la energía
solar y sobre su pecho un círculo de fuego dentro de un cuadrado de
tierra, simbolizando ambos los trabajos del hombre. Sobre el Norte se está
levantando el Sol. Como el Norte es la región de la Oscuridad, el Sol
allí simboliza nuestro triunfo sobre las Tinieblas. El Ángel
Miguel tiene un pie dentro del agua y el otro sobre la tierra, significando
la armonía entre Consciencia y Subconsciencia, entre los Opuestos.
La Templanza es el regreso de la Muerte, el Arcano XIII. Hemos vencido la
Muerte, salimos del Norte, de la oscuridad y estamos en el Oriente, en la
Luz. El sendero que vemos así lo dice.
Con la Clave XIV terminamos el segundo septenario, el de la Iluminación.
Estamos listos para adentrarnos en el tercero. Hemos compaginado nuestros
aspectos externos con los internos.
Estamos listos pues para encontrarnos con El Diablo, Arcano XV, inicio del
tercer y último septenario, conocido como el Gran Viaje.
ARCANO XV (EL DIABLO)
EL DIABLO
Carta XV del Arcano Mayor
Este arcano esta relacionado con la letra hebraica SAMED, que expresa el agente
genitivo femenino. En su conjunto representa las fuerzas de la naturaleza
bajo el aspecto bipolar (positivo y negativo) y, por analogía, la idea
del bien y del mal, que no está en ellas, sino en la mente del hombre.
Desde el punto de vista adivinatorio, el DIABLO expresa éxito en el
plano material, si se sabe seguir los consejos de la razón, mientras
que quien se entregue a los instintos se convierte en esclavo de la fatalidad.
En síntesis: LAS PASIONES FATALES.
El Diablo. Es el Arcano XV del Tarot. Con él se inicia el último
septenario de los Arcanos Mayores, conocido entre los Iniciados como "El
Gran Viaje".
Se le atribuyen la Risa y la Alegría. Representa las apariencias externas,
la ignorancia, los prejuicios, la hipocresía, los dogmatismos y la
intolerancia. En la Masonería en general, pero especialmente en cierto
Grado, el Masón jura solemnemente combatir a estos enemigos de la Humanidad.
La letra del Diablo es " AYIN" y significa " OJO".
Observad atentamente la figura: sobre la frente tiene el Diablo el Pentáculo
invertido, significando la Inversión Mental, la Falsedad y el Error.
Trata de engañarnos al estar sentado sobre un Cubo, símbolo
de la perfección espiritual, pero sus garras horribles se aferran a
ese cubo al cual están atados los Amantes, personificaciones del Consciente
y el Subconsciente (Masculino y Femenino). Sus cuernos y garras simbolizan
la Bestia que llevamos dentro y que debemos dominar y vencer. Las cadenas
que atan a los Amantes son laxas, flojas, fáciles de retirar. La Esclavitud
del Diablo es Ilusoria, es fácil de romper. Aparentemente, pues, hemos
caído en las garras del Diablo He ahí la Paradoja: detrás
de cada uno de los Amantes aparece el Fuego, Vulcano, Tubal Caín, que
una vez liberados de las Cadenas, utilizaremos en la Gran Transformación,
en el Gran Viaje de la Libido, cuya puerta es este Arcano XV. Podremos vencer
las Ilusiones y los Prejuicios que tratan de alejarnos del Conocimiento (quizás
el Racionalismo Moderno sea uno de los enemigos más grandes de la Masonería).
Nuestro Conocimiento es de naturaleza diferente, es Esotérico, es Iniciático,
el Racionalismo es para nosotros una cadena floja, fácil de desatar.
El Arcano XV ha sido considerado desde tiempos remotos la Clave de la Alquimia
y de la Magia: ¿Quién no ha oído decir, cuando alguien
es muy hábil en algún arte o práctica, " es que
tiene pacto con el Diablo"? o "es una ayudado"?
La mirada de El Diablo es fija y penetrante, nos reta, pues sabe que tenemos
miedo de iniciar el Gran Viaje. Su brazo derecho en alto, en la palma de su
mano aparecen dos caracteres extraños y en la izquierda ase un madero
o garrote amenazante, casi oculto, pero todo eso es Ilusión. El Iniciado
"roba" esa mirada, ese garrote, vence al Diablo e inicia el Gran
Viaje.
ARCANO XVI (LA TORRE)
LA TORRE
Carta XVI del Arcano Mayor
La Torre es una carta desestabilizante. Fuego, truenos, rocas dentadas que
caen - definitivamente esto luce problemático! Esta Carta no será
bienvenida por aquellos a los que no les gustan los cambios. Representa una
reversión rápida, dramática en la fortuna. Usualmente
el cambio es gradual, dándonos tiempo para adaptarnos, pero algunas
veces es rápido y explosivo. Esta es la acción de la Torre.
En películas, el héroe a veces abofetea a alguien que está
atontado o tambaleante. Habiendo intentado todo, él finalmente recurre
a un golpe punzante para terminar con él. Las crisis repentinas son
los modos en que la vida nos dice que nos despertemos. Algo funciona mal,
y Ud. no está respondiendo. Está Ud. demasiado lleno de orgullo?
Espere un golpe a su ego. Está conteniendo su enojo? Espere que la
presa explote. Está Ud. parado en una ruta? Espere una sorpresa.
Cómo Ud. responde al cambio de La Torre hace toda la diferencia de
cuán triste será la experiencia. Reconocer que la ruptura ocurrió
porque era necesaria. Tal vez "abrazar" el cambio es mucho pedir,
pero al menos sí intentar encontrar algo positivo en él. En
efecto, Ud. puede sentir una tremenda liberación por haber sido forzado
a cambiar de dirección. Puede sentir una explosión de perspicacia
acerca de su situación y alcanzar un nivel nuevo de comprensión
acerca de ella.
El Arcano XVI, La Torre. Miradla bien, pues es una carta de temer. De La Torre
caen, fulminados por un Rayo, un Hombre la Autoconsciencia) y una Mujer (la
Subconsciencia), una Corona (la Fuerza de Voluntad). La palabra Clave de la
Torre es Catástrofe¡¡¡ Su letra es PEH, Boca. Está
regida por Marte, el dios de la Guerra.
La Torre simboliza el Error y la Ignorancia, que son destruidos por el rayo
de la Comprensión y la Tolerancia. Trabajando bien al meditar sobre
la Torre, encontraremos la Iluminación, pero...¡¡¡cuidado¡¡¡
Esa Torre es de arcilla, es débil, nuestra consciencia y subconsciencia
lo son aunque creamos que nuestra Voluntad (la Corona) es fuerte, pero también
vuela por los aires al impacto de El Rayo. Pero, ánimo¡¡¡
el rayo es la Superconsciencia, que destruye el Error. Mirad las 22 letras
del Yod que semejan lágrimas o llamas, son los 22 Arcanos del Tarot.
El masón que sólo procura Fama, Gloria, Poder será destruído,
saboreará " la exquisita porquería de los halagos y la
vanagloria", a menos que deje que el rayo de la Iniciación derrumbe
viejas ideas, viejos patrones, y deje que su consciencia, su subconsciencia
y su voluntad caigan al Mar, se fundan con la Consciencia Universal, Cósmica,
de lo contrario, jamás habrá sido un Iniciado.
La Torre está íntimamente ligada al Diablo, de quien ya se hablo
aquí.
El rayo nos da una visión fugaz, pero clara, del maravilloso regalo
de la Vida, es un Relámpago, efímero, que es nuestra actual
vida, pero es un regalo precioso que el Sol nos dio, seamos agradecidos, vivamos
la vida con dignidad, seamos útiles a nuestros semejantes, fundámonos
con ese Mar, final del camino que iniciamos con el Loco. Salgamos volando
de esa Torre-Prisión que es la estrechez de miras y la mezquindad,
ellas nos conducen a la depresión, a la destrucción del hogar,
de la vida misma, la Torre es una de las cartas que también simbolizan
el suicidio espiritual, seamos Libres, Fraternos e Igualitarios. Gocemos y
hagamos gozar la Vida.
Recordemos la gran lección de los Arcanos: como es Arriba es Abajo,
como es Dentro es Fuera¡¡¡
La Torre nos simboliza las pruebas de Éter que son las más duras
del Gran Viaje, debemos vencer esas tres pruebas: la Vanidad, el Orgullo y
la Fatuidad. Son las pruebas más allá de los Viajes que emprende
el Aprendiz masón, que realiza el Compañero masón, y
que culminarán en el Gran Viaje Final del Maestro, ayudados por el
Ermitaño y representado en la Muerte.
Por mucho que hayamos avanzado en el Gran Viaje, la Torre nos recuerda que
debemos ser Humildes. El más grande de los hombres no es más
que un insignificante granito de arena en el Gran Océano del Devenir.
ARCANO XVII (LA ESTRELLA)
LA ESTRELLA
Carta XVII del Arcano Mayor
La gente siempre ha mirado las estrellas como una fuente de inspiración
y esperanza. Hay algo en su luz titilante que nos saca de nosotros y nos eleva
a un plano superior. Cuando elevamos nuestros ojos al cielo, no sentimos más
la aflicción de la tierra. La Estrella me recuerda una voz clara y
aguda de soprano. Hay algo extra-mundano en ello. Toda la severidad y densidad
de la vida nuestra de cada día ha sido tamizada dejando sólo
la esencia más pura. Después de ser expuesta a la Estrella,
nosotros nos sentimos elevados y benditos.
En las lecturas, la Estrella es mayormente bienvenida cuando el dolor y la
desesperación nos han superado.
En nuestros momentos más obscuros, necesitamos saber que hay esperanza,
que hay luz al final del túnel. La estrella es el opuesto del Diablo
el cuál nos quita nuestra fe en el futuro; esta Carta sostiene la promesa
de que podemos eventualmente encontrar paz en la mente. La estrella también
nos recuerda abrir nuestro corazón y liberar nuestros miedos y dudas.
Si Ud. ha estado reprimiéndose en cualquier aspecto, es el momento
de comenzar a brindarse generosamente.
Es importante recordar que La Estrella es inspiradora, pero que no es una
carta de soluciones prácticas o respuestas finales. Verdaderamente
si esperanza no podemos lograr nada, pero la esperanza es sólo el comienzo.
Cuando Ud. vea esta Carta, sepa que Ud. va por el buen camino. Sus objetivos
y sus aspiraciones han sido benditos, pero para realizarlas, debe realizar
una acción positiva. Use la luz de la estrella para que guíe
sus esfuerzos.
El Arcano XVII, la Estrella, significa Meditación. Su letra es TZADDI,
Anzuelo, con el que pescamos dentro de nuestra Psiquis al meditar.
Una mujer desnuda derrama sobre el Pozo (el subconsciente) y sobre la tierra
(el Consciente) dos jarros de agua. En el cielo brilla una estrella central
de 8 puntas, el Poder de Vida, la Estrella Flamígera de la Masonería,
y 7 estrellas menores también de 8 puntas, los Chakras o Centros de
Fuerza del cuerpo humano. Sobre el árbol del Sur, región del
Mediodía desde el cual en la Masonería simbólicamente
vemos la Estrella Flamígera, se posa Isis, simbolizada en el ibis;
la mujer es también Isis quien con sus piernas forma dos ángulos
que aluden a la Escuadra y el Compás masónicos.
El agua derramada en el pozo forma círculos concéntricos, la
expansión de nuestro poder mental en nuestra subconsciencia dado por
la meditación. El agua derramada sobre el suelo forma 5 arroyuelos,
nuestros 5 sentidos, uno de los cuales regresa al pozo, estableciendo la conexión
entre la subconsciencia y la consciencia.
Es una carta de una apacible quietud, como lo debe ser la meditación.
Esta carta nos llama a la meditación. Nos enseña las 4 pasos
que debemos seguir para desentrañar una pregunta o resolver un problema,
lo que será tema de las técnicas de meditación con el
tarot que se presentaran mas adelante.
ARCANO XVIII (LA LUNA)
LA LUNA
Carta XVIII del Arcano Mayor
Si miras alrededor de la habitación ahora mismo, verás (probablemente!)
gente y objetos que te reconfortan por su familiaridad. Todas las cosas están
exactamente como tú esperas que estén. Tú sabes que si
cierras los ojos y los vuelves a abrir, la habitación estará
igual.
Pero... alguna vez te has perdido lo familiar de encontrar, en su lugar, un
mundo tan extraordinario que tú no puedes ni siquiera asirlo? Esta
es la experiencia de la Luna.
La mayor parte del tiempo vivimos en un minúsculo bolsillo de normalidad
que nos envuelve como un acolchado seguro. Le damos la espalda al misterioso
universo que espera afuera.
De vez en cuando podemos volar con nuestra imaginación, o aventurarnos
a través de nuestra fantasía o de nuestra conciencia ampliada.
Nosotros podemos ser empujados hacia allí sin esperarlo a través
de drogas, locura o experiencias intensas como una batalla.
La Luna es la luz de este reino - el mundo de la sombra y la noche. Aunque
este lugar es imponente, no debe ser temerario. En las circunstancias adecuadas,
la Luna inspira y encanta. Ella mantiene la promesa de que todo lo que Ud.
imagina puede ser suyo. La Luna lo guía a lo desconocido de modo que
Ud. puede permitir que lo inusual entre dentro de su vida.
Tristemente, habitualmente tenemos miedo de la Luna. En las lecturas, esta
tarjeta a menudo da cuenta de miedos y ansiedades - las que llegan en las
partes más obscuras de la noche. La Carta 18 también significa
ilusiones. Es fácil perder nuestro camino en la luz de la luna. Asegúrese
de que las decepciones y las falsas ideas no guíen su camino. Algunas
veces la Luna es una señal de que Ud. está perdido y vagabundeando
sin ánimo. Ud. debe encontrar su camino firme y la claridad en su propósito.
La clave XVIII, La Luna, significa Nuestra Consciencia Corporal. Su letra
es QOPH, y significa parte posterior de la cabeza. También es la Clave
del Sueño reparador.
En la carta se observa a la Luna derramando Yods sobre la Tierra. Al Occidente,
un cangrejo (signo de la vida elemental) sale del agua y evoca la figura del
Escorpión. Sobre el pasto, símbolo de la vida vegetal, un lobo
(nuestra parte salvaje) y un perro (nuestra parte culturizada) le ladran a
la Luna. La Luna es el arcano del manejo del lenguaje. A lo lejos vemos dos
torres, símbolos de lo humano, de lo cotidiano.
Los Arcanos 17, 18 y 19 representan los tres estados básicos de la
mente: la Meditación, el Descanso y la Actividad. La Luna es la carta
de la limpieza mental, de la mente en reposo, serena, alejada de los fanatismos
y dogmatismos, recordándonos el viejo adagio: Hay tres verdades: tu
verdad, mi verdad, y la verdad.
La Luna nos enseña la Vía del Retorno hacia lo que somos, y
también somos cuerpo. Debemos cuidar de él para poder hacerlo
digno albergue de nuestro espíritu. No la creencia que el cuerpo humano
tiene "partes buenas" y "partes malas", pueril superchería
ya por suerte muy superada en nuestros días.
Todo nuestro cuerpo hace parte del Espíritu Puro. Como a tal debemos
tratarlo. Esa es la enseñanza de la Luna.
ARCANO XIX (EL SOL)
EL SOL
Carta XIX del Arcano Mayor
Brillante. Radiante. Centelleante. Muchas de nuestras palabras reflejan el
poder y la gloria de la luz. Cuando encendemos la luz en una habitación,
la iluminamos de manera que todos los rincones oscuros sean visibles. Cuando
encendemos la luz en nuestras mentes, estamos iluminados. Vemos claramente
y comprendemos la verdad. La energía de la luz expande nuestros límites
y nos hace brillar.
A través de la historia, la gente ha honrado al sol como la fuente
de la luz y el calor.
En los mitos de muchas culturas, el Sol es un dios prominente - lleno de vigor
y coraje.
Él es el centro de energía vital que hace que la vida en la
tierra sea posible. En el tarot el Sol simboliza vitalidad y esplendor. El
Sol es definitivamente no una carta de retiro y sumisión.. En las lecturas,
Ud. entenderá esta carta si se imagina a Ud. mismo siendo el Dios Sol.
¿Cómo piensa y siente? Ud. tiene una total confianza en Ud.
mismo. No es altanero, pero está profundamente seguro de su poder.
Tiene energía ilimitada y brilla con salud. Tiene una cierta grandeza,
y luce brillante. Finalmente, Ud. ve y comprende todo lo que está pasando
dentro de su esfera. Cuando vea esta carta, sepa que tendrá éxito
en todo lo que haga. Ahora es el momento de dejar que su luz brille.
El Sol, es una de las cartas más alegres del Tarot. El Sol al Oriente,
ilumina el escenario, en el que un niño cabalgando en Occidente libre
sobre un corcel gris (la unión de los opuestos, de nuevo), con sus
manos sueltas y sonriente, ha superado la oscuridad de la noche, entre él
y el Sol se yergue un muro gris de piedra del que nacen 4 girasoles (Heliotropos:
Camino del Sol) recordándonos de nuevo que este niño (nuestro
espíritu rejuvenecido) ha superado el Conocimiento de los 4 elementos,
el Sol es el Oro de los Alquimistas, el objetivo final de la búsqueda
del Masón (Alquimista Filosófico, es decir, Aceptado, y a veces
y ojalá Operativo) y del Alquimista, lo hemos visto primero en forma
de Estrella Flamígera y ahora en todo su esplendor. Lo dejamos a nuestras
espaldas para que nos siga iluminando en el Camino, que ahora es alegre, mirad
la sonrisa y el gesto despreocupados del Niño, así es el Iniciado
que sabe que al final del Camino encontrará la Felicidad. La letra
de El Sol es RESH que significa Cabeza. El Sol ilumina todo y nos da la Sabiduría.
Es Apolo, es Phoebo, es el Aureliano garcíamarquiano (Aureum: Oro),
nosotros somos Girasoles, Heliotropos, debemos seguir el camino que nos marca
el Sol.
El Arcano XIX significa Regeneración, Renacimiento, simbolizados por
el Estandarte naranja que el Niño porta en su mano.
De El Sol parten unos rayos rectos, el Principio Masculino, y otros ondulados,
el Principio Femenino. Tiene rostro humano, significando que es nuestro Padre,
la Fuente de la que nacemos y que nos alimenta eternamente, la Fuente de la
que el Todo brota, es Amón-Ra, de los Egipcios, es Gaulchovang, el
Padre y la Madre Universales de los indios Kogi de la Sierra Nevada de Santa
Marta, Colombia.
El muro de piedra, sólido, erguido, es la Verdad. En otro Arcano, La
Torre, el muro será de Arcilla, es el Error.
El Niño está desnudo, personificando la Verdad. El Sol lo ilumina,
es el Hombre Nuevo, el Iniciado, el Iluminado.
La alegría de Vivir debe acompañarnos en todo momento, cada
uno de nosotros es una Obra de El Sol, somos chispas de Él, somos parte
integrante de la Divinidad, somos una Obra del Gran Arquitecto Universal.
Por eso practicamos y defendemos la Fraternidad, la Igualdad, la Libertad.
Somos los Hombres Nuevos, los Niños Iluminados, somos los Masones.
La Energía y la Luz de El Sol nos inundan, y las irradiamos a nuestro
alrededor, somos Hombres Libres y de Buenas Costumbres.
ARCANO XX (EL JUICIO)
EL JUICIO
Carta XX del Arcano Mayor
Nosotros vemos gente que se levanta con la llamada de un ángel. Es
el día del Juicio, cuando los hombres de Fe son llevados el cielo,
pero ¿qué pasa con los que no son salvados? ¿Han sido
ellos juzgados y hallados en falta? Por sus pecados, ¿les será
negada la presencia de Dios? Este es el aspecto del juicio que es inquietante.
¿Cómo puede el juicio estar reconciliado con el perdón?
En efecto, El Juicio viene en dos formas. El aspecto doloroso dice, "Lo
que hiciste es incorrecto, eres malo y no vales la pena por haberlo hecho."
Este tipo de Juicio separa y no deja lugar para la redención. Es posible
juzgar sin condenar. Nosotros valoramos el problema, pesamos todos los costados
y tratamos de discernir la verdad. Reconocemos la necesidad de elegir y esperamos
el coraje para hacerlo sabiamente- pero sin culpa.
En las lecturas, esta Carta puede ser un recordatorio de que los juicios son
necesarios; algunas veces Ud. debe decidir. En tales momentos, es mejor considerar
el problema cuidadosamente y luego disponerse sin censuras. Si Ud. está
siendo juzgado por Ud. mismo, aprenda del proceso: tome lo que es de valor,
corrija lo que necesita ser corregido, pero nunca pierda de vista que Ud.
vale la pena.
Esta carta también da cuenta de los sentimientos que vienen con la
salvación. Cuando el ángel llama, Ud. renace - está limpio
de toda carga y pecado. El pasado y sus errores están detrás
suyo y Ud. está listo para comenzar otra vez. Puede aún sentir
un llamado - una convicción personal acerca de lo que Ud. quiere hacer.
Si Ud. está en un período bajo, necesitando esperanza y absolución,
El Juicio puede mostrarle que su renovación está cerca.
El Arcano XX del Tarot, el Juicio, representa la realización, el momento
en el que la consciencia humana se funde con la consciencia universal. El
Viejo Hombre debe morir para que pueda nacer el Nuevo Hombre. En Occidente,
lado de la Oscuridad, seis figuras humanas escuchan la trompeta de la Resurrección.
Su piel es de color grisáceo, simbolizando que han superado los opuestos,
el Blanco y el Negro, y salen de ataúdes cúbicos, símbolos
de la Materia. Los ataúdes flotan sobre el mar, final del río
que se inició a los pies de la Sacerdotisa, y es la Consciencia Universal.
La mujer recibe con los brazos extendidos las Siete Vibraciones (las 7 Leyes
Universales) que brotan de la Trompeta, en señal de la sublimación
del subconsciente. El hombre tiene los brazos doblados sobre el pecho, indicando
que su actividad ha sido trasladada de la consciencia a la subconsciencia.
El niño levanta sus brazos, en señal de Renacimiento.
La trompeta del Ángel Gabriel es de Oro, el oro de los Alquimistas,
y en su estandarte luce la Cruz, símbolo de los 4 Elementos.
El Juicio nos enseña la unión de la chispa de Divinidad que
todos llevamos con la Divinidad Absoluta. Es el final del Camino que emprendimos
con el Loco. Hemos logrado, al final del Viaje, armonizar nuestra Voluntad
Personal con la Voluntad Divina, con el orden Cósmico diseñado
por el Gran Arquitecto del Universo. Somos Salvos¡¡ Fuimos capaces
de dejar a un lado nuestra voluntad personal y vivir como ejecutores desinteresados
de la Voluntad Primaria, en ese momento fué que comenzamos a vivir,
resucitamos, renacimos. Liberamos los Poderes ocultos en nuestra Subconsciencia
y voluntariamente los pusimos al servicio de la expansión de la Gran
Obra, fuimos Masones Verdaderos, es el final del Hombre Antiguo, es la aparición
del Maestro, ahora podemos disponernos a disfrutar de El Mundo, Arcano XXI.
ARCANO XXI (EL MUNDO)
EL MUNDO
Carta XXI del Arcano Mayor
Es el Día de Acción de gracias. Ud. ya ha terminado una deliciosa
comida, y hay un a taza de café caliente en su mano. Los amigos y la
familia están discutiendo acerca del último fiasco, los niños
corriendo alrededor de la mesa, y sus pies están frotando la barriga
de su mascota fiel. Ud. está feliz, satisfecho y verdaderamente agradecido
(al menos hasta que tenga que lavar los platos). Por este momento, el mundo
y todo lo que hay en él es suyo.
Todos reconocemos este sentimiento. Puede venir en cualquier momento y lugar
y siempre es bienvenido.
Nosotros podemos sentirlo en casa rastrillando las hojas, o en el escenario
del mundo aceptando el Premio Nóbel. Puede parecer tranquilo y simple,
o salvaje y glorioso. ¿Qué es este sentimiento, y de donde viene?
Esta carta puede ayudarnos a descubrirlo.
El principal componente de la felicidad es la plenitud - el sentido de que
todo está trabajando junto en armonía. No de un modo estático,
con un balance dinámico. Involucrarse en también importante.
Para estar feliz, debemos sentirnos conectados- comprometidos con lo que está
a nuestro alrededor. También hay una meta - saber que tenemos objetivos
y que nos estamos moviendo hacia ellos satisfactoriamente, Cuando todos estos
elementos se juntan, nos sentimos satisfechos y benditos.
El Mundo representa estos momentos y todo lo que ellos involucran. En las
lecturas, es un signo muy positivo de que Ud. está en posición
de realizar los deseos de su corazón. Qué significa esto para
Ud. depende de su situación, pero siempre va a ser un sentimiento positivo.
Recuerde, sin embargo, que esta carta es un símbolo de activa contribución
y servicio.
Para mantener el mundo en nuestras manos, debemos entregarnos a él.
Esa es la fuente de la verdadera felicidad.
El Arcano XXI, último de la Serie, el Mundo. Significa Concentración.
Su letra es TAV significa Signo.
Enmarcada en una corona vegetal, una mujer (un andrógino, según
otras explicaciones), flota gloriosa danzando en el espacio, con una varita
mágica en cada mano. A los 4 costados están un Hombre, un Toro,
un Águila, y un León... ¿no os recuerda el simbolismo
cristiano de los 4 Evangelistas? Mateo, el Hombre, Marcos, el León,
Lucas, el Toro y Juan, el Águila?. Hay que recordar que gran parte
del Simbolismo cristiano es tomado prestado de las Tradiciones Antiguas, el
Tarot es muy anterior al Cristianismo, la Masonería también,
los Albañiles (Masones) medievales, por ejemplo, lo sabían al
esculpir sus jeroglíficos en las Catedrales Católicas y quizás
las Jerarquías Católicas, que no eran Iniciadas, sino miembros
ávidos de poder terrenal de las Noblezas Europeas, principalmente Italianas,
compradoras de Capelos cardenalicios y Papados , lo intuyeron y pensaron que
su Poder Terrenal se perdería a manos de los Albañiles, la Masonería
ha preservado el Secreto Iniciático que el Cristianismo iba a dejar
perder, o que sus Jerarcas conocen y por celos hacia la Orden ocultan y por
eso la persiguen¡¡¡..
El Mundo es la Revelación Total, el Logro Supremo, después de
haber recorrido las 7 etapas de desarrollo.
Los 4 emblemas representan el axioma del Iniciado: Saber, Querer, Osar, Callar.
La Corona vegetal está atada por dos bandas que son el símbolo
de Infinito, es la Corona de la Victoria, culminación de la Gran Obra,
tiene la forma de Huevo Cósmico, el Cero, que ya analizamos en el Loco.
NOTAS FINALES:
· Espero que a quienes ya conocían el tarot, estos mensajes
les hayan servido para ampliar sus conocimientos. Y que a quienes lo desconocían
o tenían desinformación (que es una superstición, que
es cosa de gitanos, que es cosa de saltimbanquis adivinadores y charlatanes,
etc.) comprendan ahora que para los esoteristas, el tarot es un compendio
de la sabiduría Milenaria egipcia, cuyas primera noticia se remonta
a su aparición en el libro de Toth (el tarot Egipcio). Las 78 Claves
(22 mayores y 56 menores) exigen para su lectura, que se realiza en 7 planos
o interpretaciones, un profundo conocimiento de la astrología, de la
numerología, de la Kabalah, y del simbolismo.
· Los amigos judíos tienen una ventaja adicional sobre los demás
para estudiar el tarot: ellos adaptaron el Tarot original de Toth a la tradición
hebrea y compendiaron en él la sabiduría esotérica de
la Tora. Los Gitanos lo difundieron por Europa.
· Estos mensajes que se han transmitido sobre el Tarot, serán
complementados más adelante con frases claves para cada Arcano, y también
se os dirá una técnica de meditación con el Tarot, es
sencilla, no nos quita más de 5 minutos en la mañana y otros
5 en la noche, a razón de un Arcano mayor por día. Mucha gente
cree que el Tarot es sólo para la Adivinación, también
se utiliza para ese fin, pero lo que se pretende aquí es daros a conocer
las bases simbólicas para utilizarlo como instrumento de perfeccionamiento
espiritual, hay mucha basura "adivinatoria" por ahí, y los
charlatanes, que no faltan, han convertido al Tarot en un juego de feria,
en un negocio asqueroso alimentado por la Ignorancia y la Superstición,
Se os recomienda las lecturas sobre el Tarot de Karl Jung.
· Por último, se espera que los Amigos Profanos, a través
de estos mensajes hayan podido comenzar a vislumbrar algo de lo que la Masonería
es: una Orden Esotérica e Iniciática.